Vuelve Eusebio Sacristán a Vigo para sumar tres puntos que le aseguren a la Real Sociedad su participación en la Europa League. La visita del entrenador que en la primera etapa del proyecto de Carlos Mouriño apostó por un debutante Iago Aspas para que con dos goles al Alavés salvase al equipo vigués del descenso a Segunda B, coincide con el fin del ciclo de Eduardo Berizzo, quien llevó a los célticos a una semifinal europea por primera vez en su historia.

Ambos son pasado del Celta, después de que el argentino anunciase ayer que este encuentro será el último que dirigirá al club vigués después de que se rompiesen las negociaciones para la renovación de su contrato.

La cita de hoy en Balaídos (16.45 horas, Gol TV) podría convertirse en un plebiscito para el presidente Carlos Mouriño, después de que en las redes sociales se promoviesen en las últimas horas protestas contra los dirigentes del Celta por no firmar la continuidad del entrenador que despertó en el celtismo el sueño de poder alcanzar un título europeo.

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La despedida de Berizzo ha dejado en un segundo lugar el partido con el que el Celta cierra una de las temporadas más brillantes de sus noventa y cuatro años de existencia. Las semifinales de la Copa del Rey y de la Europa League dejaron al equipo celeste sin fuerzas para afrontar el último tramo de la Liga, perdiendo toda opción de repetir plaza europea.

De hecho, el equipo vigués intentará romper una racha de seis derrotas seguidas en la competición doméstica y regalarle a la afición una victoria con la que paliar los sinsabores de los últimos días, tras la eliminación europea en Old Trafford y las derrotas ante el Alavés y el Real Madrid.

Berizzo pierde a Hugo Mallo, que ante los madrileños cumplió ciclo de tarjetas amarillas, por lo que ha sido sancionado con un partido. Sí estará Iago Aspas, expulsado por Martínez Munuera, después de que el Comité de Competición le retirase la segunda amarilla al considerar que había sido derribado en el área por Sergio Ramos. Tampoco estará en esta ocasión Radoja, con molestias en el tendón de Aquiles, que ya se perdió los dos últimos compromisos.

El técnico del Celta dejó fuera de la convocatoria, por decisión técnica, a Rubén Blanco, Planas, Beauvue y Bongonda. Intentará que su equipo se despida de la afición con una victoria, por lo que apostará por los más habituales para confeccionar un once en el que Sergio Álvarez podría ocupar la portería, con Roncaglia, Cabral, Fontás y Jonny en la defensa; Hernández, Wass y Jozabed se perfilan para el centro del campo; con Aspas, Guidetti y Sisto en ataque.

La Real afronta uno de los partidos más importantes de su reciente historia. Están en juego sus opciones de retornar a Europa en caso de victoria y si Athletic o Villarreal tropiezan.

Eusebio Sacristán dispone de toda la plantilla, salvo el sancionado Raúl Navas, para este encuentro. Recupera a Zurutuza, ausente ante el Málaga por sanción, y cuenta con sus dos máximos goleadores: Willian José y Juanmi,.

Los antecedentes del equipo donostiarra en Vigo no son los más favorables. El Celta le ha tomado la medida en las últimas temporadas y en Donostia todavía se recuerda la Liga que se perdió en pugna contra el Real Madrid, en la temporada 2002/03, por una derrota en Balaídos.

Los guipuzcoanos son el cuarto mejor equipo como visitante y hoy pueden batir su récord histórico de victorias a domicilio, actualmente en nueve, que puede ir acompañada del gran premio europeo que anhela su afición. En el día del adiós a Berizzo, el Celta intentará cerrar su gran año con un triunfo.