Tener un equipo deportivo en la máxima categoría de su disciplina es algo meritorio, pero más si esa ciudad es Pontevedra, una capital de provincia pequeña en comparación con otras grandes urbes. La Sociedad Deportiva Teucro logró hace poco más de dos semanas la gesta de regresar a la primera división nacional de balonmano y la corporación municipal quiso reconocerle el mérito con una recepción oficial en la Casa das Campás.

El alcalde, MiguelAnxo Fernández Lores, ejerció de maestro de ceremonías para felicitar al Teucro por su "excelente temporada". "No sé exactamente cuales eran las expectativas del equipo, pero desde luego estoy convencido de que nadie contaba con quedar primeros, con esta ventaja y con a falta de tantas semanas", explicó Lores.El regidor de la localidad destacó que Pontevedra era una ciudad que apostaba por el deporte y en los próximos meses organizará varios eventos relacionados con esta disciplina.

Por su parte, el edil popular responsable del área deportiva, Tomás Abeigón, quiso hacer extensiva esa felicitación a la Sociedad Deportiva y recalcó que su partido lucha y luchará para que los clubes deportivos reciban las subvenciones municipales.

Mientras, Tino Fernández, líder del PSOE local, destacó que poco más había que decirle a los campeones porque él ya se lo dice "cada sábado" que va a verlos al Pabellón. "Me hierve el culo en el asiento y sufro mucho, pero al final, nos dieron una alegría enorme". Para Luis Rei, de Marea, el Teucro y el Cisne "han hecho que el deporte nacional en Pontevedra sea el balonmano", mientras que María Rey, la responsable de Ciudadanos, destacó que no había ido al acto "a hacer campaña política", aunque sí "a promocionar el proceso de captación de apoyos del Teucro".

Precisamente sobre esa promoción habló el presidente, Carlos García-Alén, para quien la idea es "alcanzar los 2.000 socios el próximo curso" e incrementar así la actual cifra en 800. Además, Alén reconoció que ahora mismo el Teucro "no tiene los recursos suficientes para competir en Asobal", así que pidió a las personalidades políticas que "transformen las palabras en hechos y apoyen lo máximo posible al club sin quitarle dinero al resto de entidades".

Por último, el entrenador, Quique Domínguez, y el capitán, Carlos García, incidieron en el "enorme trabajo" que todos los miembros del equipo habían desempeñado esta temporada para conseguir el objetivo y apelaron a la constancia para intentar mantenerse en la Liga Asobal la temporada que viene, a la que retornarán un curso después.