La lesión de Mario Barco tras el partido ante el Coruxo deja al Pontevedra muy corto de efectivos en la punta de lanza, con solo Mateu Ferrer como único delantero nato para afrontar los partidos de clasificación para el play off de ascenso, que ahora están a una victoria, y como mínimo para hacer frente a la primera eliminatoria de la fase.

Por tal motivo desde la dirección deportiva granate decidieron comenzar a valorar la posibilidad de sumar un nuevo efectivo que diese mayor fortaleza a la delantera de cara a afrontar los partidos más importante de la temporada, una opción que a día de hoy ha sido ya descartada según confirman fuentes del propio Pontevedra.

El club dio un primer paso hacia esa posibilidad estudiando la normativa en profundidad para ver si sería posible ese fichaje que viniese a sumar goles y a dosificar los minutos entre todos los atacantes. Las posibilidades granates pasaban por localizar a un futbolistas que tuviese ficha de profesional y que llevase en el paro desde el pasado mes de diciembre, algo que reduce considerablemente la nómina de jugadores interesantes disponibles.

Por si ya fuera poca la tarea de encontrar a ese "mirlo blanco", que llegaría además muy corto de ritmo para las necesidades del equipo, pues la disponibilidad debería ser inmediata, el club se vería obligado además a tener que dar una baja en la plantilla para poder inscribir a ese nuevo jugador ya que actualmente el Pontevedra no dispone de ninguna ficha senior (mayor de 23 años) disponible.

Todos estos factores hacen que se inviable cualquier tipo de incorporación a estas alturas de la liga y los estudios previos de la dirección deportiva lerezano se quedaron simplemente en eso, sondeos previos para conocer cómo estaba el mercado y cuáles eran sus opciones.

En el pasado el Pontevedra ya acudió al mercado de fichajes para reforzar sus filas de cara al play off. Así llegaron al Pontevedra futbolistas como David Casablanca o Dani Pendín, pero sus incorporaciones respondían a casos diferentes ya que los de Pasarón sí disponían de una bola extra para fichar debido a que disponían en su plantilla de un jugador cuya lesión establecía una baja de larga duración.