"Ante todo vaya por delante que me equivoqué totalmente en el planteamiento de la primera parte. Me equivoqué en el planteamiento y en la alineación, pero traté de cambiar en el descanso y el equipo de la segunda parte, sobre todo el de los últimos 25 minutos, es el equipo que yo entreno; el equipo de la primera mitad fue irreconocible y el responsable fui yo", manifestó Luisito al término del encuentro frente al Tudelano.

"Cuando te juegas estar con los mejores y sabiendo el resultado que hubo por la mañana (la derrota de la Ponferradina en Barreiro), saber que nos íbamos a enfrentar a un rival que a mí particularmente me encanta, que llevaba una vuelta entera sin perder fuera, que es un rival muy bueno, no se puede jugar con la intensidad tan paupérrima que jugados en la primera mitad y al final nos dieron en los morros", apuntó el técnico. Luisito explicó esta equivocación en la estrategia de la primera mitad indicando que "tenía una idea el lunes de cómo jugar, el miércoles seguía con la misma idea, el jueves me la hicieron cambiar en el entrenamiento, el viernes ya tenía otra, y como yo maquino mucho unas veces me equivoco y otras acierto".

En todo caso "el equipo mereció ganar por el esfuerzo, por el tesón, por la fe, pero por el juego de la primera parte no".

En cuanto a la segunda mitad, "menos mal que con los cambios el equipo mejoró mucho porque sobre todo somos un equipo que es el fiel reflejo de lo que yo quiero: que para matarnos nos tienen que pegar más de un tiro. Es lo que yo trato de inculcarles", dice Luisito. Para el míster, "al margen de las condiciones individuales y de lo que se trabaje tácticamente, lo que hay que tener es fe y hay que ser mentalmente fuerte y este equipo lo es".

El resultado supone, para el técnico, "tres puntos de oro ante un grandísimo rival, que tanto allá como aquí fue muchísimo mejor que nosotros y hoy aquí tengo que reconocer que en la primera mitad fue muchísimo mejor que nosotros porque no nos dejó jugar".

"Si por alguien me duele es por Capi, que no merece lo que le hice hoy -señaló Luisito en relación al cambio-, pero yo entendía que hice lo mejor para el equipo porque entendía que el partido era primordial, sobre todo a balón parado, y así fueron los tres goles", explica.

En todo caso Luisito se declara "muy contento por ganar pero no por el juego, solo estoy contento por los últimos 25 minutos, pero lo que es la primera mitad, para mí fue un Pontevedra irreconocible".

Luisito dice comprender al entrenador rival, Íñigo Valencia, en sus críticas por recibir un gol fuera de tiempo, aunque el técnico granate entiende que "en fútbol el fuera de tiempo yo no lo contemplo porque esto no es baloncesto".

"Aguantar con nosotros 90 minutos aquí en Pasarón no es fácil, ni al Tudelano ni a ningún otro equipo, porque si algo tiene este equipo es ritmo, mucho ritmo, con balón, o sin balón" y reiteró su autocrítica porque en la primera parte "el equipo no estuvo bien porque salió un punto o dos por debajo de la intensidad que tenían ellos y eso a mí me dolió porque quien se jugaba todo éramos nosotros, no eran ellos".

"Somos un equipo súper humilde y en el momento en que pensamos que somos un poco mejor que el rival, ya veis lo que pasa, tenemos que estar al doscientos por cien". Sobre lo que resta de liga "quedan 21 puntos que en esta categoría dan para mucho".