El Pontevedra es un equipo de segundas partes. Si bien es cierto que la mayoría de equipos logran más goles y, por ende, puntos, a partir del minuto 46, las cifras del conjunto granate destacan especialmente cuando se trata de computar exclusivamente lo cosechado a partir del descanso.

Cuando se les pregunta por ello, tanto los jugadores como el cuerpo técnico destacan que, por un lado, "los partidos hay que madurarlos" y que, por otro, "el equipo demuestra su buen estado físico en esos tramos".

El pasado domingo, el cuadro lerezano volvió a hacer gala de su querencia por los minutos finales y, además, culminó su primera remontada del curso. Álex González, cuando el reloj marcaba el 68 de partido, ponía fin a una racha sin anotar que duraba 642 minutos. Es decir, más de diez horas y media de fútbol. Once después, en el 79, Barco culminaba el vuelco en el marcador y aseguraba dos puntos de los que a mayores tenía en el bolsillo el equipo al descanso, ya que el Burgos se adelantó en el minuto 50.

Con estos dos puntos, el Pontevedra ya acumula 12 obtenidos tras el intermedio de sus encuentros. El cuadro dirigido por Luisito ha logrado 13 victorias en lo que vale de liga. Y ocho de ellas llegaron al imponerse encuentros que tenía empatados al descanso.

Mutilvera, Racing de Ferrol, Lealtad, Osasuna B, Ponferradina, Somozas, Boiro y Burgos fueron las víctimas granates en los segundos tiempos. Esto haría un total de 16 puntos. A ellos se le restarían los cuatro perdidos a partir del ecuador ante el Celta B, Valladolid B, Racing de Santander e Izarra, en los que el Pontevedra llegó igualado al intermedio y acabó sucumbiendo, para dejar el cómputo en 12 de los 45 puntos que a día de hoy campean en el marcador granate.

Como confrontación, el cuadro lerezano tan solo ha logrado ganar tres partidos gracias exclusivamente a sus tantos en las primeras partes. Fueron ante el Izarra (2-0), el Tudelano (0-1) y la Arandina (0-2), lo que hace un total de seis puntos asegurados antes del intermedio. Mientras, ante el Palencia (2-1) y el Guijuelo (2-1), la escuadra de Luisito llegó por delante en el marcador al paso por los vestuarios, pero hubo de anotar un gol en el segundo tiempo para asegurarse el triunfo, ya que los ambos lograron empatar el partido.

23 goles en Norte

Si las cifras en cuanto a puntos demuestran el buen papel del Pontevedra en los segundos actos, los goles anotados y encajados no hacen sino reafirmar el buen nivel del equipo a partir de que el árbitro decreta la pausa. El conjunto de la ribera del Lérez ha anotado 25 de sus 35 tantos en los segundos tiempos. Es decir, el 71,4%. Mutilvera y Lealtad, con tres tantos encajados, y Boiro, con cuatro, fueron los equipos más castigados por el potencial pontevedrés. Como dato negativo, tan solo dos de estas dianas llegaron en encuentros a domicilio, lo que hace solo un 8% del total. Fueron en Guijuelo (1-1) y Aranda (0-2), mientras que los 23 restantes (92%) se cristalizaron en la portería de Fondo Norte de Pasarón.

En cuanto a tantos recibidos a partir del descanso, el bloque lerezano se queda en 10 de los 24 que Edu ha encajado (el 41,6%). Teniendo en cuenta solo estos goles, el Pontevedra ha vencido en 10 segundas partes, ha empatado 12 y tan solo ha perdido cinco en todo lo que va de liga. Para el equipo lerezano, las segundas partes siempre han sido buenas.