La jornada 27 se puede catalogar con el adjetivo de "redonda" para los intereses del Pontevedra CF.

A excepción del Boiro (décimo cuarto clasificado), ninguno de los equipos de la zona media de la tabla han conseguido sumar los tres puntos en la jornada del pasado fin de semana. Esto incluye al grupo de cuatro equipos que se han postulado como principales aspirantes a la cuarta plaza que hoy todavía ostenta el Pontevedra. Mientras el Valladolid B se dejó los puntos en Palencia, campo del que el Pontevedra regresó con un empate a cero goles en plena crisis, la Ponferradina evidenció una vez más sus problemas de gol empatando a nada en Guijuelo y ampliando las distancias con el Pontevedra nuevamente en más de un partido.

En el segundo pelotón de perseguidores las cosas tampoco fueron mejores. El Tudelano empató en Mutilva (otro de los campos de empate a cero en la dinámica negativa de los de Luisito) y el Coruxo sucumbió con claridad en Barraña ante un fortalecido Boiro, el otro gran beneficiado de la jornada vigésimo séptima.

Con el triunfo ante el Burgos la cuarta plaza ya estaba más que asegurada, pero todos estos resultados no hacen más que dar la opción al Pontevedra de conservar una semana más a mayores su puesto de privilegio salvo goleada de escándalo en Asturias.

Con esta semana ya son 17 las jornadas consecutivas que el Pontevedra descansa desde las confortables plazas que dan derecho a disputar los play off de ascenso, algo que previsiblemente se ampliará en 18 la semana próxima. Cabe decir que el curso pasado a estas alturas de competición los granates ya estaban fuera de este grupo de cabeza y permanecieron así por el resto de la temporada.