En vísperas de una jornada muy importante para el Campo Lameiro, la entidad verde ha decidido reunir a toda su familia en un encuentro que ya viene siendo costumbre en el club. Jugadores, técnicos y directivos del equipo desde su fundación en 1979 se reunieron ayer en A Chanciña para recordar viejos tiempos, enfundarse de nuevo la elástica de su equipo y compartir después una comida de confraternización.

Son muchas las personas que han pasado por el club a lo largo de sus 38 años de existencia. Cerca de medio millar de jugadores, un centenar de directivos o unos 25 entrenadores forman parte de la historia del Campo Lameiro.