Un pequeño juzgado de Barcelona acogió ayer el juicio entre la Sociedad Deportiva Teucro y Asobal mediante el cual la entidad pontevedresa le reclama a la asociación de clubes de balonmano la devolución de los 3.650 euros abonados el curso pasado en concepto de multa por no haber colocado la pista azul que solicita la liga en el partido televisado ante el Puente Genil del pasado 28 de febrero del 2016.

A Barcelona acudió en representación teucrista el presidente Carlos García-Alén mientras que por parte de Asobal estuvieron presentes dos empleados y el vicepresidente Xavier O'Callaghan.

El juicio se sucedió según lo previsto, con ambas partes exponiendo su interpretación de los hechos, si bien el club pontevedrés ha solicitado anular la testificación por parte de los testigos de Asobal al considerar que estos no eran objetivas al tratarse de empleados o directivos de la misma organización.

El Teucro reclama a la organizadora de la liga el reintegro íntegro de la multa abonada el año pasado, sin compensación ni indemnización alguna, corriendo el único riesgo en caso de perder el juicio de tener que abonar las costas procesales.

Ambas partes se encuentran ahora a la espera de conocer la resolución de la jueza, un proceso que podría extenderse por más de quince días. García-Alén dijo del juicio que "antes de empezar ya estaba toda la carne encima del asador porque nosotros lo que hicimos fue reafirmarnos en toda la documentación que presentamos". En ese sentido, las esperanzas pontevedresas por recibir una buena noticia de la justicia son relativamente moderadas: "Ahora mismo no quiero pecar de optimista y diría que tenemos un 50% de posibilidades de que nos den la razón y eso ya es mucho", apuntó el presidente.

Entre los motivos que aduce el Teucro para que le sea devuelto el importe de la sanción económica está, en un primer lugar, lo que ellos consideran una "incapacidad" de Asobal como organización sancionadora y por el otro la imposibilidad material y temporal de instalar la pista con el margen de tiempo suficiente pese a "haber hecho todo lo que estaba en nuestra mano por hacerlo", dijo el dirigente azul.

En aquella ocasión el Teucro tenía firmado con el ayuntamiento de Cangas do Morrazo la cesión de la pista azul del pabellón de O Gatañal, pero el IMD no le dio a los teucristas disponibilidad de pista con la antelación necesaria para que las labores de instalación del firme de goma fuesen realizadas de forma óptima.

Desde Asobal consideran que estos trabajos se pueden llevar a cabo en un plazo de cinco horas. Esto podría ser cierto, según especifica el Teucro, en el caso de que las planchas de goma ya se encuentren aclimatadas a la temperatura del pabellón y no precisen de un traslado en camión con las bajas temperaturas de Galicia en el pasado mes de febrero.

Peligroso precedente

En el caso de que la jueza dé la razón a los azules, el caso podría sentar un peligroso precedente en favor del resto de los clubes nacionales al ver una puerta abierta para reclamar los importes de sus respectivas multas en el caso de que la justicia confirme que Asobal no tiene autoridad sancionadora. El club pontevedrés es el primero en atreverse a cuestionar la autoridad de la liga en estas lides.