Máximo secretismo en el Pontevedra de cara a preparar el derbi provincial contra el Celta B del próximo domingo. La plantilla se ejercitó ayer en Pasarón en sesión a puerta cerrada para no dar ninguna pista a su vecino de cara a un duelo de vértigo entre el tercer y el cuarto clasificado en el que además el Pontevedra deberá presentar varias novedades en la alineación debido a las bajas.

El de esta jornada tiene muchos ingredientes para ser el partido de la jornada en Segunda B. Ya no solo por lo que se pone en juego en cuanto a lo que a clasificación se refiere, sino también porque enfrenta a una de las defensas en mejor forma del campeonato (el Pontevedra recibió dos goles en los últimos siete partidos) contra una dupla ofensiva de vértigo como la que tiene el filial vigués.

El Celta B es, después de la Cultural Leonesa, el conjunto más goleador del Grupo I de Segunda B y eso es en buena parte gracias al trabajo de sus dos referentes en la punta de lanza, el gallego Iago Iglesias y el murciano Hicham Khaloua. Entre ambos acumulan 25 dianas en la presente campaña de las 39 que suma su equipo.

Pero este Celta B es mucho más que dos jugadores. Alejandro Menéndez ha conformado un bloque muy sólido que, a diferencia de lo que suele ocurrir con la mayoría de los filiales, concede muy pocos goles y que se ha apuntalado este mes de enero con la promesa onubense, Dani Molina. Los de Barreiro son además el equipo en mejor dinámica de la liga con siete victorias, dos empates y una única derrota en los diez últimos partidos.

Revancha granate

"Si se hubiese ganado en Vigo todo sería diferente". Esa fue la frase más escuchada en el Pontevedra CF en las semanas posteriores a la derrota en Barreriro ante el filial celeste durante la primera vuelta. Los pesos pesados del vestuario, así como el entrenador Luisito, lamentaron durante varias jornadas haber dejado escapar la oportunidad de arañar puntos en un campo difícil del que muy pocos sacarán algo positivo este año y que el cuadro lerezano tuvo en su mano al jugar la mayor parte del encuentro en superioridad numérica.

El partido de este domingo tendrá por tanto tintes revanchistas, sobre todo en los que se refiere a los enfrentamientos entre Pontevedra y Celta B en estas dos últimas campañas, con un balance de victorias claramente favorable al filial olívico.

Y es que la temporada pasada los de Luisito solo pudieron empatar en su visita a Vigo para después salir derrotados en casa en la segunda vuelta en un partido en el que el delantero celeste Iago Iglesias dio el triunfo a los célticos con uno de los goles del año en Segunda B.

A todas estos intentos infructuosos de victoria para el Pontevedra en partido oficial en este derbi provincial, cabe unir también la goleada que el bloque que entrena Alejandro Menéndez le infligió a los de Luisito en Moraña esta pretemporada y en la que los pontevedreses cayeron por cuatro goles a cero en su primer amistoso del curso.