El partido contra el Palencia dejó un punto que supo a poco al Pontevedra, pero también una secuela importante a nivel físico. David Añón disputó tan sólo los primeros 45 minutos del encuentro, pero ese período de participación fue suficiente para que los problemas físicos que había comenzado a padecer durante el viaje se tradujesen en la actual neumonía que padece.

El extremo coruñés fue sustuido en el descanso debido a su estado de indisposición y tras el viaje de vuelta, el pasado lunes se realizó pruebas que reflejaron esa infección en uno de sus pulmones. Tras el diagnóstico, el futbolista regresó a su casa de A Coruña, donde descansa a la espera de ver cómo evoluciona.

De este modo, el extremo herculino es baja indefinida y su vuelta al trabajo dependerá de la mejora de su enfermedad. Ni el club ni el jugador quieren ponerse plazos, sino que sólo piensan en que Añón se recupere y esperarán a valorar la situación un par de días, necesarios para corrobar la evolución de la neumonía, producida por algún cambio de temperatura elevado al que el jugador estuvo expuesto.

Así, parece que Luisito tendrá difícil contar con David para el encuentro ante el Celta B de este domingo y aunque de momento no es baja confirmada, suausencia se podría unir a las de Íker Alegre y Mario Barco, otros jugadores fundamentales en ataque.

En otro orden de cosas, ayer se cerraba el plazo para que los equipos de Segunda B inscribiesen sus nuevas incorporaciones en el mercado invernal. Y para el Pontevedra fue una jornada de lo más tranquila. El segundo mercado de incorporaciones de la temporada tocaba a su fin en una jornada de descanso para el equipo que no tuvo ningún tipo de novedad pese a que el cuadro lerezano contaba con una ficha libre sub-23.