Misión complicada pero no imposible para el Marín Peixegalego en su visita al pabellón José Antonio Gaska de San Sebastián (que el año pasado ofrecía baloncesto de ACB) para despedir el año y de paso la primera vuelta a partir de las 21 horas.

En unas fechas poco frecuentes en el deporte profesional español, la LEB Oro no se detiene por Navidad y obliga a los marinense a emprender un largo desplazamiento hasta Euskadi en el que deberán verse las caras contra un rival recién descendido que renunció a la plaza en ACB que la federación le ofreció en verano luego de que ningún equipo de Oro consiguiese el dinero para ascender.

EL Retabet Guipúzcoa llega al encuentro con un balance de 11 victorias y cinco derrotas, a una del líder Oviedo y con nulas posibilidades de estar en la Copa debido al enfrentamiento directo entre Palencia y Burgos.

Los vascos vienen de perder la última jornada en Coruña ante el Leyma pero en casa son un equipo muy sólido que solo ha cedido en una ocasión ante el por entonces líder en las primeras jornadas, el COB de Ourense.

Con un equipo muy compensado que lidera el ala-pivot americano Carlson, los donostiarras se han hecho ya a la competición tras su descenso y han ido poco a poco apuntalando su plantel con gente de contrastada calidad. Su último refuerzo, un Jackson Capel que ya sabe lo que es enfrentarse al Peixegalego este año la haberlo hecho en las primeras jornadas con el Magia Huesca (10 puntos).

Javi Llorente cuenta para este encuentro con las bajas confirmadas de Albert Homs, Emilio Oubiña y Alec Kobre. Los de A Raña, tras una semana de muchas quejas por la labor arbitral, quieren poner fin a su senda de seis derrotas consecutivas que le ha enviado directamente a los puestos de descenso.