Al Xuventú Sanxenxo le crecen los enanos. A una profunda crisis de resultados en la que ya acumulan 7 semanas sin ganar, se suman también las numerosas bajas por lesión que tiene el equipo y los dos sancionados con los que tendrán que viajar este fin de semana a Moaña.

- Derrota en casa ante el Arenteiro. Quizás por trayectorias podría entrar dentro de lo esperado, pero no por ello deja de ser dolorosa.

- Sí, por trayectorias sí, pero esto no acaba más que empezar y de momento solo llevamos diez partidos. Es cierto que ellos van de primeros pero nosotros hicimos un buen partido hasta el minuto 70, a partir de ahí llegó una jugada aislada y desgraciada en la que hicieron el gol ellos. En ese momento nos vimos afectados por otras cosas que no me gustaron, ya más a nivel interno, pérdida de concentración e irresponsabilidades de jugadores que no nos pueden volver a pasar.

- Tras ese gol lo psicológico empezó a tener más peso que lo físico.

- Sí, pero esto me extraña porque es algo que hemos ido hablando y trabajando mucho, solo iban nueve partidos y teníamos que estar tranquilos. Los primeros 70 minutos pienso que fueron buenos e incluso pienso que, si hubiese conteo a puntos como en el boxeo, el gol habría caído de nuestro lado. Por ocasiones e intensidad merecíamos más que el Arenteiro. Después del gol tendríamos que haber seguido igual, fue mala suerte y un fallo individual, pero todavía quedaba mucho partido por delante para seguir once contra e intentar empatar o ganar. Lo que no puede pasar es que nos expulsen a dos jugadores y acabemos con dos menos cuando estamos ya con 13 jugadores sanos disponibles y ahora tener dos bajas más para el siguiente partido. Eso no lo puedo tolerar y tendré que tomar medidas. Hoy (por ayer) es un día para pensar y voy a tener que tomar medidas.

- Y en el capítulo de bajas la situación no termina de mejorar.

- No, va todavía a peor. Es algo que habíamos hablado mucho porque algunos jugadores ya son reincidentes en este tema, y lo de ayer es imperdonable. Yo perdonaré siempre un fallo técnico como fue el caso del de nuestro portero, pero otras actitudes no las tolero. Hay que ser jugador de fútbol, no de tenis. Si uno quiere jugar él solo y romper la raqueta es su problema pero aquí estamos todos y perdemos todos.