El entrenador burgalés considera bueno el empate y mostró su esperanza de que a partir de ahora su equipo comience a remontar posiciones.

En este sentido, apuntó tras el partido que "tal y como ha ido el partido era posible tanto ganar como perder. Al final, el punto para nosotros es bueno porque significa un punto de inflexión".

Mandiola señaló que "espero que el equipo sea capaz de empezar a mirar hacia arriba. Hemos sido capaces de mantener la portería a cero ante uno de los rivales de más entidad a los que se ha enfrentado el Burgos. Me voy contento porque el equipo ha dado muestras de solidez y fortaleza. Hemos dado un paso adelante ante el Pontevedra".