Faro de Vigo

Faro de Vigo

Contenido exclusivo para suscriptores digitales

"Mi ilusión es que el equipo suba a Primera, conmigo o sin mí"

"Yo nunca dejaré el club con un euro más de deuda que cuando llegué"

La presidenta del Pontevedra, en su despacho. // Gustavo Santos

-Su ilusión es devolver al equipo a Primera.

-Sí, pero puede que no conmigo. Yo solo quiero dejar los mimbres para que se pueda hacer. No soy ambiciosa. Estoy aquí porque me tocó. Mi vida se basa mucho en el día a día. Esa filosofía tuvo mucho que ver con mi accidente. Un día estás aquí y otro no. Entonces dejo que todo vaya fluyendo y me van tocando retos en mi vida. Primero me tocó el Teucro. Llegamos y nos fuimos dejándolo mejor de lo que estaba. Ahora, lo mismo con el Pontevedra. Me toca solucionar problemas y a mí, por suerte, no me disgusta hacer esto.

-Entonces, ¿celebrará Lupe Murillo el 80 aniversario dirigiendo al Pontevedra?

-A mí el Consejo de Administración me eligió el año pasado como presidenta. Son cinco años de mandato y me quedan cuatro. Calculo que los agotaré. Aunque si me canso antes o considero que mi trabajo está hecho, me iré. Solo quiero el bien de este club, no aferrarme al cargo.

-¿Se puede llegar a lograr una deuda igual a cero en un futuro?

-Sí, con una buena gestión. Por desgracias somos una SAD y no podemos volver hacia atrás. Por tanto, es importante que los gestores del club sepan de gestión empresarial. Si no es así, surgen los problemas que tuvimos. Incluso con algunos dirigentes que sí sabían de gestión empresarial, pero porque en ese caso hubo otros factores. Hay que tener los pies en el suelo y no gastar un euro de más, porque no sabes lo que te puedes encontrar de hoy para mañana. Sí diría a cualquier presidente que venga después que no es fácil, que hay que trabajar mucho y que hay que tener una implicación tremenda. El futuro pasa porque yo me vaya y quede alguien aquí que sepa lo que tiene que hacer. Lo que tengo claro es que nunca dejaré el club con un euro más de deuda que cuando llegué. El proyecto puede salir bien o mal porque yo no juego ni dirijo desde el banquillo, pero sí puedo dar la estabilidad suficiente y poner los mimbres. Debo tomar decisiones y lo hice. Eché al entrenador cuando casi ni había puesto un pie aquí y fue una decisión muy difícil porque fue nada más llegar y había un montón de condicionantes.

Compartir el artículo

stats