El Pontevedra se mide esta tarde en Pasarón al Club Deportivo Palencia, un equipo distinto y convulso que cuenta con el banquillo más inestable de la categoría y los despachos más inquietos. Llega como colista con tres derrotas. Los granates no podrán alinear, como saben ya desde el jueves, al lesionado Iker Alegre, pero dispondrán del resto del plantel para conformar un once que buscará la victoria frente a un recién ascendido.
Las dudas en el once del Pontevedra están en la solución por la que optará Luisito para suplir a Iker Alegre, referencia de la banda izquierda granate siempre que la salud se lo ha permitido. Álex González ha sido hasta ahora la pieza por la que ha apostado el técnico de Teo para completar la alineación en ausencia del asturiano, pero Mateu sigue llamando a la puerta y, de derribarla, el equipo podría salir con dos puntas en lugar de solo uno junto a dos jugadores de banda.
Pese a la derrota de la semana pasada en Santander, Luisito se mostró satisfecho con el juego de su equipo durante ciertos tramos del encuentro, por lo que no es de esperar que introduzca demasiados cambios en las restantes líneas de la escuadra granate.
Más difícil es saber en qué romperá el Palencia sobre el césped de Pasarón. El equipo castellanoleonés no ha tenido apenas una semana tranquila desde que logró el ascenso la temporada pasada y hoy tiene serias dificultades para completar una convocatoria. Entonces se sentaba en su banquillo Santi Sedano, técnico vallisoletano que llevó en silencio los problemas de cobro a los que se enfrentó en el club palentino.
La entidad morada anunció por sorpresa que no continuaría y pensó para sustituirle en un ex de varios equipos de primera, Gonzalo Arconada, hermano del mítico portero. Sin embargo Arconada apenas duró unas horas como relevo de Sedano. Al poco de confirmar el acuerdo, el entonces director deportivo, José Sietes, tuvo que salir ante los medios a explicar que el menor de los Arconada se había echado atrás. Apareció entonces un exgranate, José Aurelio Gay, pero su paso por el banquillo palentino también duró un suspiro. Los problemas económicos, el impago a jugadores y cuerpo técnico ahogaban al club.
Un nuevo inversor apareció en escena hace aproximadamente un mes. Supuso nuevo entrenador, Óscar De Paula, nuevo director deportivo, el despido de varios futbolistas y hasta la conversión del delantero centro, Diego Torres, en el futbolista-directivo. Llega un animal herido a Pasarón.
