Iker Alegre pasó ayer por la consulta del Doctor Barragáns para realizar las primeras exploraciones de la rodilla que el domingo dio un susto al jugador y a todos los aficionados del equipo granate. El extremo tendrá que volver a someterse a nuevas pruebas, una resonancia, este jueves para poder determinar con exactitud de qué lesión se trata. Alegre experimentó un fuerte dolor en un movimiento de torsión de su rodilla que le obligó a abandonar el terreno de juego justo antes de que concluyera el primer tiempo.

Por el momento la gran inflamación de la zona afectada no ha permitido al doctor emitir un diagnóstico respecto al alcance de la dolencia que afecta al atacante del Pontevedra. Al persistir el dolor cualquier manipulación de la rodilla para tratar de determinar el origen del problema genera mayor inflamación y resulta imposible determinar de dónde procede el daño, explican los servicios médicos del club. Los peores presagios podrían apuntar a una lesión de larga duración, pero el club apuntó que emitir cualquier opinión médica con tan pocos datos sería aventurado. Todavía podría tratarse de otro esguince de rodilla.

El jugador sufre una contusión ósea que le ha vuelto a provocar dolor, pero mientras la inflamación persista no es posible ser más precisos con las pruebas. Esta es la razón por la que el doctor Barragáns ha decidido dar dos días de descanso a la rodilla del ex de Ourense y Logroñés antes de realizar un exploración por imagen que tendrá lugar en la Clínica Domínguez.

El equipo disfrutará de un día de descanso tras el cual Alegre pasará por la clínica. El futbolista se mostró ayer algo desconcertado por la incertidumbre a la que se enfrenta durante estas horas. "Tengo la zona bastante dolorida y un poco rayadita la cabeza", comentó.

El granate pensó en un primer momento, a la conclusión del partido, que podría tratarse de una recaída en el esguince anterior. "Al principio fueron sensaciones parecidas a las de la otra vez, pero ahora creo que tengo un poco más de molestia y se ha inflamado un poco por un lado. Pero por lo que tengo entendido sobre temas de rodilla hay gente a la que se le inflama mucho y se rompe el cruzado y otra que también sufre mucha inflamación y no hay fractura. Pueden ser mil cosas," dijo Alegre.

Aunque no es capaz de extender la pierna por completo, el jugador sí puede caminar, según él mismo explicó.

El hábil delantero del Pontevedra se perdió la primera jornada de liga por un esguince de rodilla que le frenó durante tres semanas. A su regreso disputó los segundos 45 minutos frente al Mutilvera en Pasarón, anotando unos de los goles en la victoria de su equipo. El domingo era titular por primera vez en un partido oficial con el Pontevedra desde su llegada este verano.