Hay quienes dicen que los ídolos son una necesidad para el ser humano. A sus 26 años, camino de los 27 en agosto, Álex González no los tiene. No los necesita, su amor por el deporte está por encima de los nombres. Lo tiene claro, como las respuestas que deja caer, cortas y sencillas, como que su sitio estaba en el Pontevedra nada más descolgarle el teléfono a Luisito, como que el sufrimiento en un componente indispensable de una buena pretemporada. El año pasado sembró el terror con el Lealtad de Villaviciosa al saltar desde el banquillo y ser fundamental en el empate de su equipo. Ahora viste de granate.
- Es nuevo, de modo que preséntese a su nueva afición. Díganos su mayor virtud y un defecto futbolístico.
- Soy un futbolista de equipo, rápido, con llegada al área y con gol. Es difícil elegir una virtud, una clave, yo creo que es un cómputo global, un todo y un defecto seguramente la pierna derecha, que es la menos buena.
- Se le anuncia como interior izquierdo ¿Hay otra posición en la que se sienta cómodo o le apetezca jugar?
- El año pasado en la primera vuelta jugué de extremo derecha y en la segunda de extremo izquierda. En la banda es donde me siento más cómodo, sobre todo en la izquierda, pero eso no quiere decir que no pueda adaptarme a jugar arriba o en la banda derecha. Donde el míster crea que puedo ser de utilidad, jugaré.
- Estuvo en el Tropezón, de Cantabria, de ahí se fue al Lealtad de Villaviciosa, asturiano, y ahora llega al Pontevedra. Se va usted alejando de casa, no conoce la morriña ¿por qué eligió Pontevedra?
- Todavía es un poco pronto para la morriña, más adelante ya veremos. Respecto a por qué elegí el Pontevedra, cuando recibí la llamada de Luisito ni lo dudé. Este es un club que tiene bastante historia y quería aprovechar la oportunidad que me brindaron.
- El club anunció su fichaje hace poco más de un mes. Ahora ya conoce a sus nuevos compañeros ¿cómo ha encajado en el grupo?
- Bien, creo que el vestuario está muy unido y desde el primer momento todos pusieron facilidades para que la gente nueva se integrara. En ese sentido creo que tanto yo como todos los nuevos estamos muy a gusto.
- A su nuevo entrenador le gusta exprimirles físicamente en los entrenamientos, sobre todo en pretemporada ¿cómo lo lleva? ¿Se adapta? ¿Estaba acostumbrado trabajar a esta intensidad?
- Bueno, la pretemporada es lo que es, no le gusta a ningún jugador, pero hay que hacerla, hay que trabajar el físico. Así que nos adaptamos lo mejor que podemos. El año pasado (en el Lealtad) fue un pelín menos fuerte, pero también fue exigente y tuvimos bastantes dobles sesiones. A la larga creo que es bueno para el jugador, aunque ahora suframos bastante.
- El sábado juegan el primer partido de la temporada, frente al Celta B, y el domingo el segundo ¿Están preparados para jugar dos partidos seguidos?
- Son partidos de pretemporada en los que el equipo busca adaptarse. Llegaremos al partido con bastante carga en las piernas, pero intentaremos hacerlo lo mejor posible y cumplir los objetivos que nos pida el míster.
