Los equipos de Segunda División están prácticamente en su totalidad arrancando ya los primeros días de entrenamientos con la mayor parte de sus plantillas cerradas de cara a los primeros encuentros de pretemporada.
La otra parte del trabajo en cada club reside en la obligación de hacer crecer o al menos tratar de mantener toda esa masa social que tiene detrás un conjunto de la división de bronce del fútbol español y que partido tras partido es la otra cara de la moneda de este deporte convertido cada vez más en espectáculo de masas.
Así, la mayor parte de los equipos de Segunda B han lanzado ya sus redes a la afición con motivo de las nuevas campañas de captación de socios, abonados y simpatizantes que serán los responsables de alentar y llevar en volandas a su equipo cada fin de semana desde las gradas de sus respectivos estadios.
El Pontevedra, aunque todavía no tiene fecha para dar pistoletazo de salida a la venta de los primeros carnets, sí ha dado a conocer los precios de los abonos para esta temporada 2016/2017, unas tarifas que en nada difieren con respecto a las del pasado año y que se mantienen en una línea regular con respecto a lo que paga el aficionado medio de Segunda B si se establece una comparativa entre los principales equipos del Grupo I de Segunda B.
Lo que por el momento ningún equipo de los llamados "grandes" del grupo I de Segunda B ha sido capaz de igualar son los precios por abajo que ofrece el club granate para esta campaña que comenzará en agosto. Los 80 euros que pagará el socio senior que pretenda acudir todo el año a presenciar el fútbol en el fondo Sur del estadio Municipal de Pasarón, es la mínima cantidad a desembolsa por un aficionado de cualquiera de los equipos llamados a acabar en la parte alta de la clasificación.
Equipos como la Ponferradina (184 euros) o el Burgos (150) ofrecen abonos más económicos para los socios en la grada de tribuna, la más cara del terreno de juego y que en Pontevedra tiene un coste de 220 euros, si bien nadie puede competir con los precios que el club lerezano impone en sus fondos al haber muy pocos equipos que tengan unos precios por debajo de los 100 euros. En la otra cara de la moneda está el Rácing de Santander, con los precios más caros de la liga que van desde los 440 euros a los 115.
Dejando al margen al filial del Celta, cuyos partidos se pueden ver retirando el carné del primer equipo, en Galicia todavía faltan por conocerse las tarifas de Coruxo o Boiro, pero ni Somozas (100 euros abono único) ni Rácing de Ferrol (entre 235 y 130) ofrecen mejores condiciones para el aficionado senior.
Por la contra, en lo que sí están pasando al Pontevedra por la derecha es en las promociones de cara a la campaña de captación de socios. Mientras el club que preside Lupe Murillo tan solo ofrece condiciones más favorables para pensionistas, bonificados, juveniles o niños tal y como hacen los demás equipos de España, en otros estadios están tirando de imaginación y premiando fidelidad o capacidad de atraer nuevos socios.
Así, en la Cultural Leonesa ofrecen posibilidades de abonos 2x1 y premian con descuentos aquellos aficionados que han permanecido fieles a su equipo la temporada pasada, algo que también hacen este año en Burgos.
Otra iniciativa interesantes es la que oferta el Tudelano, con unos precios de abonos senior entre los 220 y los 165 euros. En Tudela quisieron premiar la capacidad de aumentar la masa social premiando con descuentos al socio capaz de aportar nuevas altas.
