El Celta dio a conocer la fecha en que tienen que reincorporarse al trabajo los cuatro jugadores internacionales que han estado este mes disputando competiciones internacionales: los chilenos Fabián Orellana, Pablo, el Tucu, Hernández y Marcelo Díaz, flamantes campeones de la Copa de América del Centenario, y el sueco John Guidetti, eliminado con Suecia en la fase de grupos de la Eurocopa de Francia.

El club no espera en esta fecha su quinto internacional, el español Manuel Agudo, Nolito, que cerrará en breve su fichaje por el Manchester City de Josep Guardiola.

La vuelta a los entrenamientos se producirá de modo escalonado. Los primeros en llegar serán los chilenos Marcelo Díaz y Pablo Hernández. Los dos sufrieron distintas lesiones durante la celebración de la Copa América en Estados Unidos y el club les ha pedido que adelanten algunas semanas su regreso para que los servicios médicos puedan comprobar sobre el terreno su estado físico y, a la vez, supervisar su proceso de recuperación para acortar al máximo su vuelta al trabajo con el grupo. Según informó ayer el Celta, a Marcelo Díaz, que durante la Copa América sufrió diversos problemas musculares aunque puedo jugar la final, se le espera en Vigo en un par de semana, mientras que Pablo Hernández, que sufrió un fuerte esguince de rodilla durante el encuentro de semifinales ante Colombia y tiene por delante unas seis semanas de baja, debe regresar dentro de tres semanas.

Por lo que respecta al sueco John Guidetti, a quien el Celta ha prohibido participar en los Juegos Olímpicos de Río , debe retornar a Vigo un mes después que sus compañeros no internacionales, es decir, entre el 3 y el 4 de agosto, la misma fecha en que se espera en la ciudad Fabián Orellana.

El Celta regresará a los entrenamientos el próximo lunes. Salvo que en los próximos días se resuelvan las situaciones de Álex López y Levy Madinda, Berizzo arrancará la pretemporada con 20 jugadores del primer equipo (incluidos el ferrolano, el gabonés y los lesionados Fontás y Beauvue), además de David Costas y un puñado de jóvenes canteranos cuyo número no ha sido aún precisado.