El Celta despierta mayor interés en España que fuera. La pasada temporada fue el séptimo equipo de Primera con mayor audiencia televisiva, al registrar una media de 580.000 espectadores por partido, según los datos de la LFP que recoge el diario As. Ello supone el 3,58% de la audiencia española.

El interés mediático de los célticos, sin embargo, disminuyó fuera, donde su porcentaje de audiencia se redujo hasta el 2,18 por ciento. La media en los partidos del Celta en el exterior fue de 1,4 millones de espectadores. Con esos datos, los vigueses descienden a la decimoséptima plaza de la Liga.

Mejorar la proyección en el extranjero es uno de los retos de la directiva de Carlos Mouriño, que espera aprovechar el tirón por participar en la Europa League. Al presidente céltico también le preocupa que los beneficios por los derechos de televisión se vean reducidos por la menor implantación social del Celta. Este concepto se aplica en función de los ingresos por taquillas y abonos. A mayor recaudación, más porcentaje en el reparto del 25 por ciento que la Liga destina a los clubes por este concepto. Ayer, Mouriño fijó entre 60 y 63 millones de euros el próximo presupuesto del Celta, que espera recibir 49 millones por los derechos televisivos. "En el reparto del 25% por la implantación social estamos a la altura del Eibar y de otro equipo más. El resto nos superan con mucho por recaudación de abonos. Por lo tanto, tenemos una ligera ventaja ahora contra los que tienen deudas, pero a partir de ahí seremos de los más pobres de Primera División", sostiene el presidente del Celta.

El club ha anunciado una subida de los abonos. "Siempre digo que los sacrificios tienen que ser compartidos. Estamos buscando fórmulas para que sea más ligero para los socios. Los precios de los abonos son los más bajos y llevamos ocho años sin subirlos. Es una pena porque en el reparto de televisión no solo perdemos dinero cuando no lo cobramos al socio, porque ese era un sacrificio nuestro y estábamos dispuestos a hacerlo. Pero con el nuevo reparto de televisión, somos de los últimos en ese 25% por la implantación social. Eso nos pone en unas condiciones muy difíciles para el futuro", dijo Mouriño, antes de asegurar que el club rechazó una gran oferta de un patrocinador tras la retirada del doble chevrón de Citroën de la camiseta celeste, "porque no nos convenía la marca", explicó.