En una prueba solo para valientes, aventureros y, sobre todo, con mucho sentido del humor y ganas de superarse a uno mismo. Este fue el perfil de los "gladiadores" que se midieron ayer en la segunda edición de la Gladiator Race, que batió el récord de participación con 2.600 corredores. De todos ellos, los más rápidos en completar el circuito de 33 obstáculos fueron Javier López y Verónica Noya, que invirtieron 30:45 y 39:26 minutos respectivamente. Eso en categoría rocket, mientras que en la warrior, los más rápidos fueron Cástor Salgado (41:42) y Alice Finot (48:40). La prueba resultó todo un éxito a pesar de la dureza que presentó. Los "gladiadores" recorrieron las pirámides, paredes verticales, toboganes y pasaron por el barro. Una de las pruebas más duras fueron las de agua, como las "zamburguesas", mientras que sorprendió el "Mont Blanc" una nueva estructura sobre las que los participantes reptaron sobre el Lérez a seis metros de altura.