El Pontevedra aspira a crear un plantel corto y lo más gallego posible para la próxima temporada. Esa es la intención de la dirección deportiva, que buscará jugadores de la zona para nutrir las filas granates y solo se acudirá al mercado en busca de futbolistas de fuera de Galicia en el caso de que estos marquen las diferencias con respecto a lo que ya hay en la plantilla o el mercado.

El proyecto seguirá de este modo los derroteros de la pasada temporada, cuando únicamente llegaron a tierras lerezanas en el verano Verdú, Borjas y Jandrín como jugadores a los que buscar acomodo en la ciudad. Si bien a estos hombres también se unieron posteriormente otros como Company, Bello y Hugo Rodríguez ante las dificultades que presenta el mercado invernal para buscar un perfil de futbolista más específico en el corto periodo de tiempo existente.

Este año la situación no va a variar y prueba de ello es que el club ha decidido no prolongar los contratos de los tres jugadores andaluces, presentando la opción de renovación solo a Company, Jandrín y Borjas como jugadores de fuera de Galicia junto al argentino Adrián Gómez ya más que asentado en la ciudad.

La posibilidad de tener un bloque con el mayor ADN gallego posible pasa ahora por las manos de los propios futbolistas, quien esta semana deberán de ir poco a poco dando respuesta a las propuestas de renovación después de un primer día de la semana muy parado en las oficinas del club al no recibir de momento notificación alguna por parte de ningún futbolista.

Mala suerte del Grupo I

La andadura en el play off de los equipos que han competido con el Pontevedra esta temporada en el Grupo I de Segunda División B ha resultado más corta de los esperado para muchos.

Aparentes "cocos" como el Rácing de Ferrol o el Tudelano y su enorme segunda vuelta, se han quedado eliminados a las primeras de cambio a manos de conjuntos de mayor presupuesto como el Cádiz o el Hércules de Alicante.

De esta forma el número de clubes del Grupo I que siguen con vida en las semifinales por el ascenso se reduce al 50%. Por un lado el UD Logroñés, que eliminó al filial del Villareal, y por otro el Rácing de Santander, que deberá seguir peleando por tratar de ascender después de caer en su primera oportunidad directa de subir a Segunda a manos de un Reus que fue dueño y señor de la eliminatoria con un 4-0 de resultado total entre los dos encuentros.