La Federación Galega de Piragüismo (Fegapi) ha salido al paso acerca de las acusaciones de acoso vertidas la pasada semana por el CP Verducido, el cual les acusó de abuso de poder en la gestión de las instalaciones deportivas del Pontillón.

A través de un comunicado, la Federación aseguró que es la Xunta de Galicia y no la Comunidad de Montes ni la Comunidad de Vecinos el titular de las instalaciones de Verducido por lo que ninguna de estas asociaciones tienen ningún derecho sobre un terreno que sobre el se construyeron las instalaciones deportivas para posteriormente ceder su uso a la Federación Gallega.

El comunicado también añade que "el uso del complejo deportivo debe desarrollarse en condiciones de igualdad para todos los clubes de piragüismo de Galicia" y la vecindad del CP Verducido a las instalaciones "o le otorga ningún derecho ni le coloca por encima de los demás. Todos los clubes saben que está prohibido el estacionamiento de vehículos y furgonetas dentro del recinto, pero el CP Verducido se saltó esa norma".

El ente autonómico que preside José Alfredo Bea continúa su texto asegurando que no existe ninguna campaña de acoso contra el Club Piragüismo Verducido, al cual en el pasado se le cedió las llaves de entrada al recinto en atención a la cercanía y se les concedió permiso para colocar una caseta en la explanada del Complejo para abrir un bar con ocasión de las Competiciones.

Para la Federación las desavenencias actuales con el C.P. Verducido tienen su origen en la solicitud de regularizar el negocio debido a la existencia de quejas por la venta de bebidas alcohólicas en dicha caseta, algo totalmente prohibido en un recinto deportivo y por lo cual Fegapi aclara que recibió la comunicación expresa del Comité Galego de Xustiza Deportiva. Motivo por el cual aclaran, "se procedió a desplazar la caseta a un lugar donde no estorbe a la actividad deportiva" luego de la negativa del club a hacerlo.