Las victorias en el mundo del deporte no siempre se miden en la consecución de títulos o medallas. Detrás de cada deportista siempre hay una historia, como es el caso con Maika Jarrillo, que a pesar de ser una de las gimnastas más prometedoras de Galicia, se ha convertido en un ejemplo de superación en el mundo del deporte gallego.
A pesar de sus 16 años, Maika Jarrillo, del Club Treboada, llevará su experiencia a Chile tras ser invitada a los primeros Juegos Deportivos de Verano en Atacama. La prueba se celebrará en la localidad de Caldera los días 4 y 5 de febrero.
"Tuve un problema hace años en Antes", explicaba la deportista señalando que a su llegada a Pontevedra, la gimnasia rítmica, su familia y el apoyo de la Asociación Déficit de Atención e Hiperactividad (ADAHPO), le "ayudó a levantar cabeza y a ver que era capaz de hacer algo más, que no era una niña que no servía para nada".
Un crecimiento personal de la mano de ADAHPO y que "a raíz del deporte de la gimnasia ha ido aumentando", señalaba la María del Carmen Pesqueira, su madre. Con el Club As Triscas primero y ahora con el Treboada, Jarrillo pasaría a situarse en la élite gallega de este deporte.
La invitación le llega a la gimnasta por su participación en el campus internacional de Nuria Cabanillas, pasando a ser la embajadora deportiva de Pontevedra en la ciudad de Caldera, donde explicará su historia de superación e intentará seguir progresando en su deporte, con el sueño de que este sea el comienzo de una importante trayectoria internacional.
"La inseguridad hace que muchas veces sea incapaz de ver una salida. Presentas dificultades en el colegio y es complicado anímicamente afrontarlo", señala la presidenta de ADAHPO, Montserrat Álvarez. El consejo que llevará a Chile Jarrillo: "que no se vengan abajo nunca, con la ayuda de otras personas te puedes levantar".
