EL Poio Pescamar quiere quitarse la losa de las cinco derrotas consecutivas que arrastra, dos de ellas tras el parón de selección. La recuperación pasa por A Seca, por eso el club hace un llamamiento a la afición para llevar en volandas al equipo a las 18.30 horas ante el Móstoles en un partido que podría ser clave de cara a los intereses de las poienses.
El cuadro rojilla se centra ya en mejorar sus números en la recta final de año, en la que afrontará dos choques ante rivales directos en la zona media-baja de la Primera División. El primero de ellos, el Móstoles, es un rival que marcha décimo con 12 puntos, tres más que el Poio, por lo que es un rival directo.
Una semana más tarde el último enfrentamiento oficial del año llevará a las rojillas hasta Ferrol para jugar ante un Valdetires que es undécimo con diez puntos. No serán lo únicos compromisos del Poio Fútbol Sala el final de año, en el que se afanan por recuperar las buenas sensaciones de inicio de temporada. Además afrontarán dos partidos de la fase de grupos de la Copa Xunta, el miércoles 16 ante el Burela a domicilio y contra el Leis Marcón en casa, el martes 22 de diciembre.
