El Casal de Ferreirós acogió ayer la presentación de la XVI edición de la Subida a A Escusa, la clásica cita automovilística que tendrá lugar durante todo el día de mañana en Poio. Una edición en la que se seguirán respetando las mismas medidas de seguridad que hasta el momento, si bien los fatales acontecimientos de la pasada semana en el rally de Carral hacen que desde la organización del evento se extremen las precauciones y, sobre todo, se solicita al público que respete minuciosamente los espacios adecuados para tal uso. Este año la prueba se llevará a cabo únicamente durante la jornada del sábado, al celebrarse el domingo en A Escusa la Volta Ciclista a Galicia.

Al encuentro celebrado en la mañana de ayer acudieron la concejala de Deportes del Concello de Poio, Marga Caldas, los representantes de la organización Noemí Blas -jefa de la escudería Buxa Motor- y su hijo Fabián Esperón -responsable de seguridad- y el vigente campeón de la prueba, el piloto pontevedrés Jacobo Sobral.

La concejala de Deportes se felicitó de que la localidad cumpliese ya dieciséis años albergando esta cita automovilística, dependiente de la Federación Gallega de Automovilismo, lo que en su opinión supone un "reflejo del fuerte arraigo y tradición que tiene el mundo del automovilismo en Poio". Ante las voces discordantes que esta semana se hicieron notar acerca de la celebración de la carrera, Marga Caldas explicó que "entendemos que no le guste a todo el mundo, y por ello trataremos de causar el menor malestar posible a estas personas". "Aunque el Concello recibió alguna queja, pedimos un poco de calma y comprensión", puntualizó la concejala, quien asimismo recordó que la prueba racabó una serie de firmas de apoyo.

Desde la organización se hizo hincapié en que la prueba cuenta con la autorización de la Xunta y la colaboración de hasta 40 efectivos entre Guardia Civil, Policía Local y Protección Civil. Unas cifras que sumadas a los miembros organizadores alcanzan unas 110 personas pendientes de la carrera.

La XVI Subida a A Escusa cuenta con 40 inscritos, entre los que destacan los pontevedreses Jacobo Sobral y Alexis Viéitez, que podrían decidir el título en esta última prueba del campeonato. Por la mañana, a partir de las 11.30 horas, se llevará a cabo una manga de entrenamientos, tras la que se disputarán dos carreras oficiales. Ya por la tarde, los pilotos decidirán si vuelven a realizar otra toma de contacto o directamente disputan el resto de pruebas puntuables.