El Teucro dio un paso de gigante en su carrera hacia el ascenso a Asobal al vencer al Alcobendas en un partido jugado de poder a poder y en el que los hombres de Quique Domínguez sacaron a relucir su casta para darle la vuelta al marcador cuando la situación se puso muy peligrosa.

Fue una jornada completa para los intereses del Teucro ya que vuelve a tener una ventaja de seis puntos sobre sus rivales directos, Atlético Valladolid y Sinfín, que perdieron en sus respectivos partidos. Los aficionados que se dieron cita en el Municipal salieron muy satisfechos del juego realizado por los teucristas, en un choque que se presentaba complicado debido a las bajas de Marcos Dorado, Víctor Rodríguez y Carlos Pombo, que no pudieron vestirse de corto debido a sus lesiones.

Durante la primera mitad el dominio fue para el Teucro, aunque con mínimas diferencias, pero aún así se llegó al descanso con cuatro goles de ventaja (19-15). El conjunto madrileño comprendió que tenía una buena ocasión para acabar con la imbatibilidad de los teucristas en su feudo debido a esas bajas, por lo que puso más ritmo al partido y eso le llevó a situarse por delante en el marcador. Parecía que se consumiría la derrota de los locales, pero fue en ese instante cuando sacaron a relucir su raza y doblegaron a un rival que se veía impotente para frenar las acometidas de los hombres de Quique Domínguez.Se trata de una victoria de las que hacen afición.