Pablo González fue uno de los damnificados con la llegada de Luisito al banquillo del Pontevedra. El central, que había ocupado la titularidad prácticamente en toda la liga, se quedó fuera de la primera lista del técnico santiagués, aunque mañana domingo estará en Laracha al entrar entre los dieciséis elegidos. El defensa granate aceptó de buen grado la decisión de Luisito, pero dispuesto a demostrarle que tiene un sitio en el once inicial y poder disfrutar del ascenso al final de la temporada.
- Llevan dos victorias consecutivas que le han aupado a la quinta posición, ¿es éste el camino a seguir para ser campeones al final de liga?
- Está claro, es lo que veníamos buscando desde el inicio de liga. Ahora que lo hicimos hay que seguir trabajando para mejorar esa racha en lo máximo posible.
- A priori, el campo del Laracha es uno de los asequibles para sumar tres puntos y meterse de lleno en la lucha por el título.
- Tampoco es así. Puede parecer que el partido no es difícil, pero no podemos olvidarnos de lo que sucedió el año pasado allí. Tenemos que salir a tope, sin ningún tipo de confianza y que los tres puntos se vengan para Pontevedra.
- A nivel personal, ¿un poco decepcionado por no haber podido entrar en la convocatoria ante el Boiro?
- A nadie le gusta quedar fuera de la convocatoria. Llega un entrenador nuevo, se producen situaciones nuevas, y lo único que te queda es seguir trabajando y esperar que me llegue una oportunidad.
- ¿De pasar de ser titular indiscutible a no ir convocado hay mucha diferencia, por lo que su único deseo será volver cuanto antes a contar en el once inicial?
- Está claro. Hasta ahora había jugado habitualmente, pero no me puedo venir abajo, sino trabajar más todavía y convencer a Luisito que es el que manda ahora mismo.
- Parece que es un técnico muy exigente y que a nivel físico pide un gran esfuerzo.
- En ese aspecto no hay duda de que estamos trabajando mucho más, y que con el paso de las jornadas se dejará notar esa mejoría. Creo que en dos semanas ese trabajo se va a dejar notar mucho en los partidos.
- La presencia de Luisito puede ser clave para conseguir el objetivo marcado por todos al inicio de la pretemporada.
- No cabe duda. Cuando llega un entrenador nuevo todos nos esforzamos más para tener el puesto. Su presencia nos puede llevar en dos o tres partidos a estar en la posición que todos deseamos y luchar por ese anhelado ascenso que no exigen desde la directiva con derecho, ya que tenemos muy buen equipo.
- Habla de exigencias, ¿hay mucha diferencia entre Luisito y Manu Fernández?
- A nivel de intensidad en los entrenamientos trabajamos mucho más con Luisito, y eso tiene que tener un premio más adelante, sobre todo de cara a los aficionados cuando acudan a los partidos, ya que podrán disfrutar más.
- ¿Tras las diez primeras jornadas ocupan la quinta posición, ¿ve algún rival directo para ese primer puesto?
- Todavía es muy pronto, pueden cambiar mucho las cosas, pero es cierto que equipos como el Choco, que está haciendo una muy buena temporada nos complique el primer puesto.
- El Boiro dejó muy buenas sensaciones el pasado domingo en Pasarón y en la pasada campaña ya disputó la fase de ascenso.
- El Boiro hizo un equipo para estar mucho más arriba, pero al igual que nosotros al principio no le fueron las cosas bien, pero entiendo que al final de la liga va a estar entre los cuatro primeros.
- ¿Es cierto que cuando están sobre el campo notan mucho la presión de la afición, sobre todo cuando el resultado no es favorable?
- Sí, pero tenemos que entenderlo, es un club diferente. El Pontevedra no debería estar en esta categoría y todos los rivales le esperan como el equipo a batir, por lo que entiendo esa exigencia que tiene tanto la directiva como la afición cuando no jugamos bien. Esperemos cambiar la situación y dentro de poco, volver a contar con su apoyo como sucedió en el play-off.
