Óscar García se muestra cauto a la hora de valorar la situación de su equipo, algo que viene haciendo en las dos temporadas que está al frente del Sanxenxo. En la pasada campaña se quedó sin premio tras estar en la mayoría de las jornadas en puestos de ascenso.

La derrota del pasado jueves ante el Porriño provocó que perdiesen el liderato a manos del Ribadumia, pero sobre el futuro se muestra optimista al señalar que "todavía tenemos cinco puntos de ventaja sobre el tercer clasificado y quedan otros doce en juego". Afirma que "está claro que a partir de mañana -por hoy- que vuelven a los entrenamientos, tenemos que empezar a corregir muchas cosas si es que queremos lograr el objetivo".

Ante la posibilidad de que le vuelve a suceder algo similar a la pasada campaña, Óscar García confiesa que "ni en la pasada campaña ni en esta éramos favoritos para optar a esos puestos de ascenso, pero está claro que este año ya no me sirve de consuelo si al final dicen que somos un buen equipo. El objetivo que buscamos es otro, y no hay que engañarse".

Añade el técnico que "para ascender todos tenemos que dar mucho más de sí, empezando por mi mismo. No hay excusas que valgan, tenemos la plantilla que queríamos y no podemos decir que es corta, porque es con la que empezamos".

En relación a la derrota ante el Porriño, considera que "al poco de empezar el partido fallamos un penalti, eso pudo cambiar todo, pero es cierto que durante sesenta o setenta minutos hemos jugado muy mal. No estoy contento con el partido y por eso hay que cambiar algunas cosas".