Estupefactos quedaron los jugadores de la plantilla del Pontevedra cuando hace unos días al finalizar la sesión de entrenamiento celebrada en A Xunqueira se encontraron con la presencia de un inspector de Trabajo que les interrogó para conocer su situación contractural con la entidad.

Todo parece indicar que la visita se produjo a causa de una denuncia de un jugador ante la administración laboral en la que dio a conocer su situación actual. Hay que recordar que en estos momentos, el Pontevedra tiene apartado de los entrenamientos y sin licencia federativa a Javi Nogueira, Santi Domínguez y Richi, que siguen compareciendo en los entrenamientos, aunque sin poder entrenar con el resto de la plantilla.

Con antelación, hace unos meses, Iago Paz también había vivido la misma situación y en su momento amenazó a los dirigentes del club con presentar una denuncia ante Trabajo. Posteriormente, el futbolista llegó a un acuerdo y acabó rescindiendo su contrato para firmar por el Ribadumia, club en el que milita actualmente.

Hace dos temporadas, el club también tuvo que acudir al Juzgado de lo Social tras una reclamación tramitada por la empresa Masalma Sport, que representaba a los jugadores africanos Douglas Hugues, Anthony Banda y Juan Manuel Ela, por tratar de rescindir sus contratos, pero aparte por no hacer a todas las cantidades que se les adeudaban.

De todos modos, hay que reconocer que son varios los clubes pertenecientes a Tercera División que están siendo investigados por la Inspección de Trabajo en los últimos meses, debido a las múltiples denuncias que se producen a lo largo de la temporada.

En relación a la situación que están viviendo en estos momentos Santi Domínguez, Richi y Javi Nogueira, la comisión deportiva del Pontevedra que forman Roberto Feáns y Alberto Argibay ya le recomendó al director deportivo Milo Abelleira que volviese a darle el permiso oportuno para volver a los entrenamientos con la plantilla, algo que por el momento no se produjo.

Por otra parte, la comisión deportiva y algunos dirigentes están preocupados con el proyecto que hay de cara a la próxima temporada, sea en Segunda División B o en Tercera, debido a que en estos momentos el noventa por ciento de la plantilla finaliza su contrato al final de esta campaña, motivo por el que comenzarán a entablar negociaciones con los futbolistas que interesan de cara a seguir defendiendo los colores del club.

La intención es atar a la mayoría de jugadores con el fin de que no suceda lo de las últimas temporadas en las que hubo que renovar la plantilla casi en su totalidad y eso provocó que el equipo tardase en conjuntarse. El club quiere mantener el bloque y hacer los mínimos fichajes posibles, pero siempre con jugadores de calidad contrastada en los puestos vitales, aunque todo va a depender de como se resuelva la ampliación de capital que comenzará la próxima semana.