El Teucro sufrió ayer un duro varapalo, pero no por la derrota en sí, sino por la forma en la que cayó derrotado ante el Go Fit Sinfín, un rival directo en la lucha por los puestos de play-off. Los de Javier Barrios realizaron quizás el peor partido de toda la temporada y eso le supone alejarse de la zona privilegiada de la clasificación, por lo que a partir de ahora tendrá que esmerarse en sus actuaciones si todavía piensa en jugar la fase de ascenso.
Fue un duro correctivo y ya desde el primer momento se pudo ver que el equipo no estaba al nivel de otras ocasiones. Fue amortiguando el resultado durante quince minutos (8-4), pero a partir de ahí, los cántabros se mostraron muy superiores y dejaban en evidencia a la defensa pontevedresa, por lo que al descanso ya se llegó con una desventaja de nueve goles que hacían presagiar el desastre.
El Teucro comienza a notar la falta de banquillo, porque las bajas de Juan Manuel Bar y David Chapela, están siendo decisivas en algunos partidos, pero es que además, Álex Pombo y Víctor Rodríguez llegaron al encuentro muy condicionados en el aspecto físico.
En la segunda mitad, el Sinfín se desmelenó y consiguió irse en el marcador con mucha facilidad, llegando a tener incluso una ventaja de 13 tantos. Barrios trató de evitar la debacle con numerosas rotaciones, pero imposible frenar el ataque santanderino que imponía su ley desde los nueve metros. Al final derrota muy contundente que puede perjudicar al Teucro de cara a los próximos enfrentamientos, en especial el del próximo sábado ante el Servigroup Benidorm, otro de los rivales directos en la lucha por meterse en el play-off.
