El capitán del Teucro y uno de sus hombres más determinantes a lo largo de la temporada defiende que el equipo "tiene que ir a por todas" y destaca como un plus el hecho de que lleguen sin la presión que tienen los otros participantes. "Nuestro único objetivo era la permanencia", recuerda Toño Fernández. Sin embargo, también hace un llamamiento para aprovechar la inesperada oportunidad. "Tenemos que devolver el club a la categoría en la que se merece estar por historia", reafirma.

¿Cuál es la clave para lograrlo? "Ser nosotros mismos", responde, consciente de que estar en Irún este fin de semana supone "un premio a la trayectoria" que ha tenido el plantel azul a lo largo de toda la competición. "Hemos ganado a todos los equipos que están ahí", recuerda Toño. Pese a haber logrado esas victorias, no esconde la expectación que supone volver de nuevo a una pista como la de Hondartza, que "impone".

De hecho, uno de los principales escollos que tendrán que superar los pontevedreses será la presión que ejercerá una afición local que llenará este polideportivo, dejando solo una representación inferior a las 90 entradas para cada uno de los equipos visitantes. La disponibilidad de los pases fue motivo de polémica entre la directiva pontevedresa y la guipuzcoana. Carlos García-Alén reprochó al club anfitrión la "mala gestión" en la organización de esta fase de ascenso.