El Celta echa de menos los puntos que dejó escapar en los minutos finales de seis partidos de la presente Liga. Esos reveses in extremis le supusieron la pérdida de nueve puntos. Con ese botín, el equipo de Juan Carlos Unzué afrontaría los últimos cuatro partidos de la competición doméstica en una situación más ventajosa. Ahora, el conjunto celeste agota las pocas opciones que le quedan de clasificarse para Europa. Para seguir vivo en la pelea por una plaza con premio europeo, los célticos ya no puede permitirse más tropiezos en los cuatro partidos que le restan de competición: Villarreal, Deportivo, Real Madrid y Levante. Ayer, Hugo Mallo se acordaba de esos goles encajados en los instantes finales.

"Uno intenta hacerlo lo mejor posible. Los partidos no se dan como uno quiere y hay algunos que si hubiesen durado 80 minutos el resultado sería otro. Hemos perdido bastantes partidos en los últimos diez minutos y eso ha marcado una regularidad que no hemos tenido. Pero aún tenemos oportunidades [de clasificación para Europa]. El sábado nos enfrentamos a un rival directo y hay que intentar sacar los tres puntos para seguir en la pelea", comentó Hugo Mallo en rueda de prensa.

El Celta ocupa la décima plaza, con 45 puntos, a tres del séptimo (Sevilla). Su comienzo de curso no fue el deseado. El debut de Unzué como entrenador céltico acabó con el triunfo de la Real Sociedad en Balaídos (2-3), gracias a un gol de Willian José en el minuto 85. En la quinta jornada fue el Getafe el beneficiados con un empate en Vigo tras el tanto de Ángel a falta de cinco minutos (1-1). El Girona se llevó el mismo premio (3-3) con un tanto de Juanpe en el minuto 86. Después vendrían los tropiezos en Málaga (2-1) y en Valencia (2-1) por los goles de Recio y de Parejo en los minutos 83 y 81, respectivamente. De esta mala costumbre de los de Unzué también se aprovechó el Espanyol, que empató en Vigo (2-2) con un remate de Gerard Moreno en el minuto 87.

Mallo ve complicado el objetivo que anhelaban club y afición: "Las opciones europeas las veo complicadas, como en toda la temporada. Del partido contra el Villarreal depende cómo podamos acabar la temporada".

No obstante, el capitán cree que los rivales han ayudado a que el Celta mantenga posibilidades de concluir en puestos europeos: "Hemos tenido oportunidades. Desaprovechamos las del Málaga y el Leganés. La del sábado es una oportunidad que no debemos dejar escapar. Si se nos escapa tendríamos que decir adiós prácticamente al objetivo de Europa".

"Da la sensación de que este año ningún equipo quiere ese séptimo puesto. De hecho, parecía que nosotros estábamos muy mal. Haciendo las cosas no del todo bien, o sin sacar los resultados que deberíamos haber sacado, aún seguimos con opciones de conseguir ese séptimo puesto.Tenemos delante a un Villarreal que le espera un calendario complicado (Barcelona, Valencia, Deportivo y Real Madrid)", apunta el zaguero del Celta sobre un "submarino amarillo", que es sexto, con 51 puntos.

El capitán céltico admite que al equipo de Unzué le sienta bien la defensa de tres con la que inicia el juego en las últimas jornadas, para buscar mejor salida del balón, crear superioridad en el centro del campo y generar más acciones de ataque. "Me he sentido bastante cómodo con la defensa de tres y creo que nos ha ido bastante bien. Hemos hecho buen juego, hemos tenido bastantes ocasiones de gol a partir de una buena salida del balón y creo que eso ha sido en base al inicio de la jugada con tres defensas. Con los tres centrales, el día del Barcelona y del Valencia nos fue bien, pero sobre todo ser nosotros mismos, tener el balón, tener las cosas claras, jugar en campo contrario, acabar las jugadas y hacer daño", añadió Mallo.