La primera vuelta en la máxima categoría femenina del fútbol sala llega hoy a su término para los representantes ourensanos. Al Cidade das Burgas se le ha resistido la victoria en las 14 jornadas precedentes, aunque en varias hizo méritos para arrancarle puntos incluso a los conjuntos más poderosos de la liga. Esta tarde se cruza con otro mal clasificado, el Cádiz FSF (Os Remedios; 17.00 horas).

Con tanta liga por delante, todas las distancias son salvables. El conjunto entrenado por Manolo Codeso es penúltimo con solo dos empates en su haber. El antepenúltimo, el Soto del Real, que también descendería, suma cinco y el corte de la permanencia, que marcan las jerezanas del Guadalcacín, está alejado en nueve puntos.

Más allá de las matemáticas, acabar la primera vuelta con un triunfo alimentaría el espíritu de un equipo lastimado por las bajas y por tantos desenlaces adversos. Casi siempre le ha salido cruz a las verdiblancas esta temporada, pero siempre se han levantado. Hoy aspiran a cambiar el signo ante un visitante que también ha sumado únicamente dos puntos.

El Cádiz, nuevo en la Primera División, ha anotado cuatro tantos más que el Cidade das Burgas, pero es el más batido de la categoría con un total de 77 tantos en contra, 25 más que las ourensanas. El club verdiblanco, que está celebrando el décimo aniversario de su fundación, hizo esta semana un llamamiento a sus aficionados para que esta tarde acudan a la central y le den un empujón anímico a una plantilla que siempre lo da todo.

Por su parte, el Ourense Envialia visita precisamente al Guadalcacín (Pabellón Municipal, 18.00 horas) con el objetivo de sumar su octava victoria y afianzarse en puestos de Copa de España. Los puntos contra los equipos de abajo, como fueron los logrados en el derbi y los que buscará la próxima semana de nuevo en Cádiz, ayudarán a los de José Carlos Martín, Chipi, a escalar posiciones en la tabla.