Fonsi Valverde regresó en esta campaña a sus orígenes. El factor sentimental y sus ganas de volver a los banquillos tras un tiempo sin entrenar han llevado al preparador a asumir un reto a priori muy complicado y con el objetivo de no pasar apuros para mantener la categoría.
El Gondomar de este año nada tiene que ver con el del curso pasado. La remodelación de la plantilla ha sido absoluta pero de momento en su campo las cosas no le están saliendo bien y se encuentran a un punto del descenso.
El conjunto local ha ganado un partido ante el Pontellas (2-1) y obtuvo un empate con el Erizana. Y ha perdido cuatro partidos y encajando muchos goles. Ante el Campo Lameiro lo hizo por 0-3. El equipo ourensano del Bande tampoco tuvo problemas para alzarse con los tres puntos (2-4). El Moaña los pasó por encima (0-4) y el Atios tampoco tuvo problemas (1-4). Un partido que a priori sale como favorito la UD Ourense para sumar la cuarta victoria consecutiva.