La Unión Deportiva Ourense disputa esta tarde (O Couto, 16.30 horas) su encuentro de la undécima jornada de liga, con el objetivo claro de sumar su sexta victoria consecutiva en casa. Su rival, el Ribeiro, ha perdido los cuatro partidos disputados. Ante el Estradense, el Moaña, el Erizana y el Atios. El único punto que sumó a domicilio fue en el derbi provincial, ante el Nogueira de Ramuín.

Se trata de un equipo que ocupa la penúltima posición en la tabla con seis puntos. Los de José Luis Vázquez han perdido a su portero titular Pablo Pérez por motivos laborales, saldrán al campo a dejarse la piel para seguir soñando con la permanencia y tampoco podrán contar con Adrián, que fue expulsado el pasado domingo ante el Sanxenxo. Es un equipo que sabe a lo que juega y suele emplear bien sus armas en todos los partidos, aunque a domicilio suele bajar bastante, pero en un derbi provincial puede pasar de todo.

El once más probable será el formado por Xoán; Quique Ruanova, Bruno, Bruno Villar, Isma, Jairo, Guilli, Álex, Fran y Adri. Aunque podría haber alguna novedad de salida. El equipo de Ribadavia estará acompañado por muchos seguidores que quieren arropar a sus jugadores para que puedan sumar algo positivo de este desplazamiento a Ourense.

Ayer por la tarde en el campo del Colegio Miraflores el conjunto unionista hizo el último entrenamiento de cara al partido de esta tarde y el entrenador Fernando Currás puede introducir algunos cambios en su propuesta inicial, pues no quedó satisfecho del rendimiento de algunos jugadores el pasado domingo donde su equipo perdió con el colista Pontellas. Una defensa donde regresa Miguel Codeso, jugará de nuevo Samuel en la portería, En el centro del campo, podría haber las novedades de Omar y Aitor Martínez con Luis González, en la delantera, la novedades podría ser la presencia de Adrián y Hugo García, como jugadores más adelantados, y en las bandas Alfredo y Jony. Para completar el once el técnico unionista tiene a Pablo Corzo, Oli, Josu y Julio y también el joven Carlos. Pues es consciente de que el domingo tiene que viajar a Bande, uno de los rivales directos por el ascenso y tampoco quiere correr riesgos a que se le lesione alguno de los jugadores que vienen siendo fijos en todos los encuentros de liga que se han disputado. Se espera un buen ambiente en las gradas y los jugadores unionistas son conscientes de que la afición no está muy contenta del rendimiento que está ofreciendo el equipo en los últimos partidos.