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Una pareja de gol consolidada

Josu y Adrián fueron protagonistas por segundo domingo consecutivo de la victoria de la UD Ourense - "Era un centro, pero si Adrián no despista al portero, la coge", afirma el lateral sobre su afortunado tanto en Porriño

Los unionistas Adrián y Josu celebran un gol en O Couto. // Jesús Regal

"Miré a Adrián, que le había buscado la espalda al central, y la quise centrar. Él le dio al aire, como me había pasado cinco minutos antes a mí, y eso despistó al portero, porque si no la habría cogido. Y acabó dentro". Así recuerda Josu, lateral de la Unión Deportiva Ourense, el gol que le dio la victoria a su equipo el pasado domingo en el campo de O Lourambal.

Un guiño de la fortuna que el zaguero, que marca por segunda semana consecutiva por primera vez desde que juega al fútbol, se toma con ironía marca de la casa. "Me daba vergüenza celebrarlo -apunta Josu-, pero el partido estaba siendo complicado ante un rival directo y es importante estar arriba desde el principio, porque después es complicado recortar puntos. Por eso me alegré, porque significaba la victoria. Es un gol de equipo y me da igual quien lo metiese. Es más mérito de Adrián por engañar al portero, porque si no hubiese cogido el balón".

En su análisis de todo lo que había sucedido hasta ese 1-2 que llegó en el minuto 81, el lateral ourensanista destaca que un exceso de confianza cuando mejor pintaba el partido pudo costarles puntos. "En los primeros minutos tuvieron un par de balones con peligro, pero metimos el gol dominamos bien. Incluso nos confiamos un poco. Nos vimos superiores, eso nos llevó a relajarnos y nos empataron de estrategia. A partir de ahí el partido fue mucho más disputado. La segunda parte estuvo nivelada, aunque nosotros tuvimos las ocasiones más claras", relata Josu.

El lateral demostró fuerza en sus visitas al campo contrario con el partido ya avanzado, aunque asegura que no se encuentra en su mejor momento de forma. "Haber estado estas últimas temporadas en Segunda B te deja un poso que se ve al final de los partidos, pero me noto justo -asegura el defensa-. Al acabar estaba reventado y contra el Caselas no me encontré bien. La pretemporada fue corta, estuve dos semanas fastidiado por el golpe de Celanova, y si que noto que no estoy al 100 %"

En cuanto al plano colectivo, el que fuera capitán del Ourense ve "ilusión y ambición" en el vestuario. "El proyecto lleva ya cuatro años, se están consiguiendo los objetivos y este año lo volveremos a intentar, para eso se confeccionó el equipo", afirma en su asunción de la presión. Josu matiza que no será una tarea sencilla y que no son convenientes las prisas. "El equipo ha sabido revertir el palo del primer partido, que no es fácil. No se puede olvidar que esto es un 11 contra 11 y que puede pasar de todo. A veces estamos un poco precipitados porque parece que se quiere ascender ya, pero quedan 34 jornadas. Esto va partido a partido y las salidas serán difíciles. Los campos pequeños pueden hacernos daño y hay que saber competir", remarca el zaguero.

En este tramo de despegue, a Josu le reconforta sentirse respaldado por una afición que se está dando cita en torno al millar en el estadio de O Couto y que ha competido en número con los anfitriones en las dos primeras salidas a la provincia de Pontevedra. "Creo que va a ser la tónica de la temporada, que haya más gente de nuestra afición que de la de ellos -confía el defensa-. Eso es una motivación y te obliga a jugar mejor por esa gente que se sacrifica y va a los partidos. Cuanta más gente, más motivación. Da vidilla. Sin la afición, el fútbol no tiene sentido".

La siguiente cita de los unionistas será el próximo domingo, a las 17.30 horas, en casa. Llega el Beluso de Bueu, un conjunto con la etiqueta de recién ascendido que se mantiene invicto tras cuatro asaltos. Josu entiende que no pueden permitirse dos versiones tan opuestas como las que ofrecieron en el último encuentro en O Couto contra el Caselas. "Mentalidad y actitud. Todo se basa en eso. Si no las tienes, te puede ganar cualquiera que tenga más, porque ellos también saben jugar al fútbol. Contra el Caselas rozamos la perfección para lo que es un partido de Preferente en el primer tiempo, sacando el balón desde atrás, con intensidad y con ocasiones, y en la segunda parte rozamos el ridículo, y ahí las dos caras. Somos nosotros los que tenemos que ganar y tratar de proponer lo de la primera parte".

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