Australia no fue talismán para el biker de Maceda Pablo Rodríguez, que llegaba con buenas sensaciones a un complicado circuito tras un positivo tramo final en la Copa del Mundo de mountainbike. Una mala salida de los ciclistas de la selección española que salían más adelante y la falta de opciones para remontar de los que partían más atrás hizo perder en los primeros compases de carrera todas las opciones de verlos en las posiciones acostumbradas y sin estar en ningún momento en la lucha siquiera por el 'top ten' en la carrera celebrado ayer en Cairns.

David Valero sería el mejor clasificado, en el puesto 20, a 3:28, mientras que Carlos Coloma finalizaba en el 29º, a 4:44. Peor le fueron las cosas al de Maceda, Pablo Rodríguez, 51º, a 8:47 del campeón, y a Sergio Mantecón, que ni siquiera podía terminar la prueba.

Valero perdía la ventaja de su primera fila de la parrilla y tanto él como el ourensano pasaban sobre el puesto 25 al término del 'start loop', aunque Coloma compensaba rápidamente salir desde la cuarta fila e incluso sobrepasaba al granadino poco después, pero sería insuficiente para meterse en las posiciones delanteras. Los tres pasarían a rodar en un tercer grupo, pero lejos de la cabeza -entre los puestos 25 y 30- y en la segunda vuelta ya cedían 1:29, con Mantecón aún más atrás.

Pero la suerte de los españoles sería diferente: Valero comenzaba a carburar y remontaba algunas posiciones, para ser 25º al término de la tercera vuelta y Coloma se mantenía. Por el contrario Pablo Rodríguez desaparecía de ese grupo, mientras que Mantecón también perdía puestos.

En un Mundial absolutamente desafortunado para España, Nino Schurter entraba en la leyenda del BTT al convertirse en el primer corredor que se ha anotado seis Campeonatos del Mundo en la máxima categoría, los tres últimos de forma consecutiva, culminando doce meses perfectos desde que ganó los Juegos Olímpicos en Río, siguiendo con el pleno de victorias en la Copa del Mundo, y terminando con una carrera que dominó sin exhibirse hasta que lanzó su único, pero definitivo, ataque en la última vuelta. El checo Jaroslav Kulhavy, a 7", y el también suizo Thomas Listscher, a 15", completaban un podio del que estuvieron muy lejos los españoles.