El Nova Xestión Pabellón y el Carnes do Ribeiro se cruzan mañana (pabellón de Oira; 12.15 horas) en un atractivo partido de rivalidad provincial. El de la primera vuelta se resolvió por 25-24 para los ribadavienses, que marchan terceros después de 12 jornadas con las mismas victorias, ocho, que el segundo y el cuarto. Los pabellonistas son quintos con seis triunfos.

El entrenador del Nova Xestión, Diego Lorenzo, le quita relevancia al traslado del encuentro a Oira y al horario matinal: "Este mes ya estamos acostumbrados por los arreglos que se están haciendo en el anexo. Esperábamos que estaría listo para este sábado, pero a principio de semana ya nos dijeron que había que buscar otra pista. Por lo de jugar de mañana, ya venimos de hacerlo en O Rosal y a ver si repetimos otro partido tan bueno como el que hicimos allí".

Al técnico le dejó muy satisfecho el triunfo sobre el Novás, aunque considera que no es extrapolable a la cita de mañana: "Fue un partido muy completo, en portería, defensa y ataque. Fue una de las pocas veces que evitamos los fallos, aunque un derbi es un derbi. Siempre es complicado, porque contra nosotros salen al 200 % y supongo que estarán todos, aunque Celso llevaba un par de semanas de baja. Contra ellos nunca es fácil, pero esta vez procuraremos centrarnos en hacerlo bien, sin tenerlos en cuenta, mirando más de no fallar nosotros que lo que hagan ellos".

El marcador histórico favorece claramente al Carnes do Ribeiro, asume: "Siempre estamos en el partido, hasta el final, pero menos en uno que le ganamos el año pasado, históricamente tira para ellos. Intentaremos romper esa estadística". Diego Lorenzo entiende que será crucial controlar sus transiciones: "Si tienen a Celso, que es su mejor jugador, habrá que tener en cuenta su potencial, porque es muy desequilibrante. A nivel de grupo, tenemos que evitar los fallos en ataque, porque los partidos de las últimas temporadas contra ellos se rompen con nuestros errores. En ataque posicional estamos parejos, pero en el contragolpe son rapidísimos. Si fallamos, ellos lo aprovechan y rompen el partido".

El entrenador pabellonista está contento con el comportamiento del equipo: "Es un año de transición para el club porque al principio de temporada tuvimos muchas bajas importantes y alguno también marchó hace poco. Estamos jugando casi todos los partidos con cuatro juveniles y el objetivo es salvar la temporada cuanto antes. Vamos camino de ello. Se está haciendo un buen trabajo, pero la plantilla es demasiado corta para competir por estar más arriba".