"Hoy presentamos a nuestro fichaje estrella. No va a estar en el terreno de juego, pero será fundamental para el proyecto y para lo que quiere ser este club". Así le daba la bienvenida a Fernando Currás, nuevo coordinador de la cantera de la Unión Deportiva Ourense, el presidente unionista, Modesto García. "Para todos los que formamos este proyecto -añadió en su prólogo- es un orgullo, un privilegio y un lujo poder contar con él para estar al frente de la cantera, que es más importante a medio y largo plazo que el primer equipo".
Modesto García recordó el compromiso del exjugador del Ourense con el club desde que llegó de Melilla. "Lleva hecho mucho trabajo sin nada a cambio, dando buenas ideas y ayudando a la gente de la base. Ahora, por suerte, podemos formalizar esto y por eso es la mejor noticia que podíamos dar. Fernando Currás va a ser fundamental en el futuro de este club, a no ser que le salga una oferta espectacular, que ojalá, pero él siempre va a tener aquí las puertas abiertas".
El nuevo coordinador tratará de corresponder los agradecimientos"con trabajo, con dedicación y tratando de sumar". Currás explicó que su entrada oficial en la UD Ourense surgió "con naturalidad" y como una corazonada: "Soy muy de guiarme por el corazón más que por la cabeza, y en todo momento me he sentido identificado con el club desde el día uno. El sentimiento de CD Ourense pesa, sigo siendo profesional del fútbol y espero serlo muchos años porque es mi gran pasión, y creo que no hay ningún sitio mejor que este para seguir aprendiendo y creciendo".
El nuevo responsable de la cantera anunció algunas de las decisiones en firme. Él mismo cogerá el conjunto juvenil. "Trataremos de ayudar a los niños en el día a día y que estén lo mejor preparados posible para asumir la responsabilidad de ascender al primer equipo", explicó. Agustín Ruiz se ocupará del cadete. "Es otro excompañero del Ourense -subrayó Currás-, una persona que creemos diferencial en lo que conocemos, y es un lujo tenerle a nuestro lado".
Todavía no se ha decidido si habrá equipo cadete B ni el entrenador del infantil. "Hacia abajo, la mayoría de los monitores van a continuar porque así se lo han ganado". Al respecto, Currás expuso que "después de un periodo de observación, se va a dar continuidad a lo que creemos que funciona". Los que estén contentos y quieran seguir van a tener la oportunidad de hacerlo "sobre todo en edades tempranas", puntualizó.
"Aunque vayamos canalizando, hay que dar cabida a todos. Es complicado filtrar en cuanto a calidad a un niño al que le gusta el deporte y sobre todo en educación deportiva hay mucho trabajo por hacer. Es muy importante educar a los niños, antes de nada como personas, porque eso redunda en la sociedad. Es una de nuestras obligaciones y, según vayan creciendo, la selección natural de este deporte los irá calificando".
En cuanto a los equipos de fútbol 11, Fernando Currás indicó que todavía no se ha decidido si se van a duplicar las líneas. "Un juvenil, un cadete y un infantil son seguros. No sabemos si podemos hacer más. No se trata de tener por tener, sino de calidad, pero no tenemos instalaciones para llevar a cabo lo que a lo mejor nos gustaría. Dentro de lo que podamos disponer, en esas últimas categoría sí trataremos de filtrar un poco y que el futbolista perciba que el equipo representativo de la ciudad juega delante de 1.500 personas, porque queremos seguir creciendo en masa social, y tiene que sentir desde el primer momento que pertenecer a la UD Ourense es un orgullo. Tenemos que contagiarlo, que así lo sientan. Esa es nuestra labor".
Por encima de los cargos, para Fernando Currás la esencia de su trabajo será consolidar la estructura de fútbol base de un club "que no para de crecer", indicó. "Es una responsabilidad enorme, más allá de las categorías tanto del primer equipo como de la base. Siempre he creído que el fútbol es de la gente, sino no tendría sentido esto, y este club tiene mucha gente detrás que siente, que lo vive y eso, a los que nos toca tomar decisiones, nos exige. La palabra es exigencia. La gente quiere ver al equipo crecer y no creo que se pueda crecer a base de comprar las cosas y sí de crearlas, interiorizarlas, de que la gente comparta ese sentimiento desde lo más abajo posible, por eso es importante el tema de la escuela de iniciación".
Currás se ve ante "un reto maravilloso" ante el que garantiza dedicación, esfuerzo y compromiso. "Estos dos años me parecen de un mérito enorme. Es muy fácil elegir a los mejores, ganar y presumir de categorías. Lo difícil es trabajar con niños que deciden venir a la UD Ourense por sentimiento y de todo ello ir construyendo un club. Eso se está haciendo y tiene un valor incalculable.
