Dentro de un mes, la Unión Deportiva Ourense cumplirá tres años de vida inmersa en la planificación del proyecto de abordaje a la Preferente Autonómica. De sus 74 partidos oficiales, los unionistas han obtenido un jugo de dos ascensos, dos títulos de liga, una Copa Diputación y una Supercopa de Tercera Autonómica. Han aprovechado el tiempo, la mejor fórmula para encarar con optimismo nuevos retos, tanto en el plano deportivo como en la escala social y económica.

La plantilla está en reconversión. Un total de 11 futbolistas han causado baja, por lo que solo permanecen en las filas unionistas tres de los pioneros de aquel primer entrenamiento del 11 de agosto de 2014 en el sintético del campus universitario: Xurxo, Xaco y Diego Soto. Dos de las líneas están completas. La portería cuenta con dos guardametas con experiencia como Lucas Sierra y Samuel Vázquez.

El puesto de delantero centro también está cubierto, salvo sorpresa, con Hugo García, Unai y Adrián Rodríguez, que podrán aliarse con otros futbolistas ofensivos como Xaco, Cristian y el recurso de Senén. Omar sería el jugador llamado a ocupar la mediapunta, aunque si por algo se caracteriza la composición, ya avanzada, del próximo plantel es por la versatilidad de muchos de sus integrantes.

En defensa también quedan pocas vacantes tras confirmarse la continuidad de Xurxo, Sergio, Otero, el propio Senén y la llegada de Alejandro Ocampo. Puede desenvolverse en el eje de la zaga Julio Martínez y el técnico ya ha anunciado la intención de fichar a un lateral más. La próxima semana el club presentará oficialmente a su segundo nuevo centrocampista, Toni Álvarez, que se unirá a Fran Martínez, Julio Martínez y Diego Soto en la demarcación menos poblada. Dos de los tres refuerzos pendientes podrían jugar ahí para darle consistencia por dentro a un bloque que afronta por tercer año el objetivo del ascenso.

En las últimas diez temporadas, solo cinco de los 20 equipos ourensanos que dieron el salto al grupo Sur de Preferente han rebasado la barrera de los 70 puntos. El promedio de puntos necesarios para subir fue de 68,9, por lo que más del 30 % de la puntuación del campeón o el subcampeón se queda por el camino. Solo ganando una veintena de los 34 partidos se tiene al alcance de la mano el ascenso. El margen de error se reduce, pues, a medida que se cambia de escalón. El incremento del potencial deportivo implica nuevos gastos y la necesidad de generar mayores ingresos. A finales del pasado mes de abril se aprobó un incremento de 10 euros en el carné básico (mayores de 25 años), que pasa de 30 a 40 euros. El carné del socio protector también sube de 50 a 60 euros, con el regalo de la camiseta oficial de la próxima temporada y un 10 % descuento en productos del club.

Los incrementos en el carné son menores para las personas con menos ingresos. El familiar tendrá un coste de 65 euros (pareja adulta) y de 20 euros por hijo. Se mantiene el 25 % de descuento por el convenio con el Cidade das Burgas y habrá un carné de colaboración de 10 euros con el femenino. Los socios con derecho a participar en las asambleas deberán abonar 110 euros siempre que tengan dos años de antigüedad como abonado.

El club anunciará la próxima semana la campaña de captación de ingresos por publicidad en sus diversos formatos. Con buena musculatura social y financiera, de la que la directiva rendirá cuentas el día 28 en asamblea, la escalada de la UD Ourense será imparable.