Los cinco corredores españoles que tienen posibilidades de participar en la carrera de cross country de los Juegos Olímpicos de Río de Janeiro le han pedido al seleccionador, Cristóbal Sánchez, que no demore la decisión. Superado el tramo inicial de la temporada, con tres pruebas de la Copa del Mundo y el campeonato continental despachados, los "bikers" deben planificar las siguientes semanas de trabajo bien hacia la cita olímpica, bien hacia el Mundial. Además, no es sana la incertidumbre ante una convocatoria de tanta trascendencia deportiva y emocional.

Según el ránking de clasificación olímpica cerrado el pasado 25 de mayo, España ocupa la tercera posición con 5.936, por detrás de Suiza (9.877) y Francia (9.378) y por delante de la República Checa (5.690) e Italia (5.671), que serán los cinco países que contarán con tres corredores en Río.

El mejor español en esa clasificación es Carlos Coloma, noveno con 1.114 puntos. Logró el diploma olímpico en Londres 2012, con la sexta posición final, por lo que su presencia en Brasil parece clara. Es el presente de esta ciclista y fue décimo en la primera cita de la Copa del Mundo, en Cairns, el 25º en Albstadt y el 11º el pasado domingo en La Bresse.

El pasado, el nombre en mayúsculas, el corredor más laureado del BTT español es José Antonio Hermida, medallista en Atenas y una apuesta segura en las grandes citas internacionales. Es el segundo español en el ránking UCI y atraviesa por un buen momento de forma. No parece probable que se quede en casa. En Maceda, villa natal de Pablo Rodríguez, sueñan con que en Río puedan animar a la pareja, que ya estuvo en el Preolímpico del pasado otoño. El meritorio palmarés del macedano es su gran baza. Además, tras el pinchazo de Australia y el mal trago del Europeo, en las dos últimas pruebas de la Copa del Mundo ha dado lo mejor de sí. El seleccionador deberá elegir entre él y los otros dos candidatos, Sergio Mantecón y David Valero.