Primera derrota de la temporada fuera del Paco Paz para el Club Ourense Baloncesto. El equipo de Gonzalo García tuvo el partido controlado hasta los minutos finales, a pesar de no estar acertado en ataque, pero los errores en los tiros libres y las pérdidas de balón acabaron pasándole factura ante un Unión Financiera Baloncesto Oviedo que acertó en los triples en momentos clave.

Pero el partido fue muy igualado de principio a fin, aunque el equipo de Carles Marco fue casi siempre por delante en el marcador a excepción del minuto 15, cuando el COB consiguió ponerse un punto por encima (24-25). Las ventajas de los ovetenses no superaron los ocho puntos hasta el descanso, a pesar de mostrarse muy acertados en los triples con Víctor Pérez y con un caudal de puntos importante en Trist y Swing. El conjunto ourensano tiró de su defensa, la capacidad de control del rebote y destellos de Pedro Rivero o Kapelan para hacer que el 11 % en triples al descanso le pasase una factura mayor que apenas seis puntos de desventaja.

El tercer cuarto fue el más delicado porque el Oviedo dio dos arreones que obligaron a un sobreesfuerzo al COB. Rivero y Kapelan respondieron al primero con su acierto en el triple, con tres consecutivos y de nuevo Kapelan, Rejón y un inspirado Agbelese en ataque y en defensa, salvo en su sucesión de fallos en los tiros libres, hicieron lo propio en el segundo en el que consiguieron una máxima de diez puntos tras tres triples consecutivas y una falta antideportiva a Rowley.

Dentro del partido

Pero al último cuarto el COB llegó vivo, con tan solo dos puntos de desventaja y ahí se encontró con que faltó acierto en el tiro, tomar mejores decisiones en momentos clave y que los tiros libres no fueron una losa tan pesada después de sumar hasta once fallos que resultaron decisivos. A pesar de todo ello hasta el último minuto tuvo opciones, pero Swing, que tiene una facilidad para anotar asombrosa y que demostró además que es uno de esos jugadores a los que les gusta tener el balón en las manos cuando el partido está caliente, llevó siempre el peso anotador en el conjunto asturiano. El golpe de gracia lo daría el holandés Van Wijk con dos triples que dejaron sin opción de remontada al COB.

El público ovetense disfrutó como en los mejores tiempos de una emocionante y divertida segunda parte que concluyó con el final que todos ansiaban en Pumarín, una victoria para el equipo de Carles Marco, la segunda en los cuatro partidos que van de temporada y también la segunda en casa.

Buen partido de un Unión Financiera al que aún le faltan piezas por encajar. Mario Cabanas está lejos de su mejor nivel y Trist, a pesar de sus buenos números, aún está en proceso de adaptación. Pero el buen camino quedó trazado ayer en un pabellón de Pumarín del que el COB se fue con muchas tareas a mejorar, pero volviendo a competir y teniendo opciones de triunfo hasta el final. No debe pasar por alto que los de Gonzalo García de Vitoria se encuentran todavía en fase de construcción. El siguiente reto será sin duda mucho más complicado y emotivo, el derbi ante Breogán del próximo sábado en el Paco Paz.