Las prisas por ganar de la Unión Deportiva Ourense le dieron buen resultado esta vez. Rebosaron los goles y las ocasiones antes y después de que el Atlético Velle bajase los brazos. Con los ocho goles de ayer llegó la segunda victoria consecutiva, aunque tan importantes como los puntos fueron los progresos que se le apreciaron a los de Antonio Dacosta como equipo. Aumentaron el ritmo del despliegue, que se sostuvo hasta el final, y la fluidez para trenzar sus innumerables aproximaciones al área.
El bloque osciló con y sin balón más ajustado que en episodios anteriores y en el capítulo individual se ganó la mención destacada Cristian Dacosta por establecer un nuevo registro de efectividad en la breve historia unionista. El interior fue ayer el mejor cazador al rentabilizar el borbotón ofensivo de un equipo que, por primera vez, también acabó con su portería intacta.
Dos buenas paradas del portero Bruno y un doble poste, tras un genial taconazo de Julio Salgado, avisaron del primer gol, que la UD Ourense le deberá a la cortesía de la defensa en el intento de sacar el balón. Julio Salgado recogió la mala entrega en el área y, de remate raso, rebasó al portero.
En seguida le cedió el turno al protagonista del partido no sin antes malgastar uno de los numerosos mano a mano que sostuvieron los unionistas con el portero visitante. En el 27, Cristian centró desde la derecha y Rizos derribó al delantero centro, que tendría que ser cambiado antes del descanso con una fuerte inflamación en la zona del tobillo debido al pisotón. Cristian anotó el primero de sus cinco goles desde los once metros, con dedicatoria al banquillo.
Haría además los dos últimos de la primera parte y los dos que abrieron la segunda. En el 34 ajustó con destreza su remate al palo derecho y en los siguientes esperó a empujar el balón tras servicios de Roberto Dacosta, que ayer perfeccionó sus pases, Xaco y Senén. El último en llegar a la UD Ourense le saca varias piernas a la categoría y se mostró muy incisivo por la banda izquierda, tanto en el cometido ofensivo como cuando se retrasó al lateral, tras sentarse Lucas Nieto en el descanso.
Ya en el tramo final del partido llegaron los goles de Jorge. Había perdonado acabando en la primera parte, pero las dos que tuvo en la segunda acabaron en la red. El Atlético Velle ya se había descosido ante el castigo, pero no renunció a su propuesta asociativa ni cayó en la patada de la desesperación. No tuvo fuerza para incomodar primero a Samuel y después a Héctor y la UD Ourense erradicó ayer los deslices en coordenadas delicadas del campo que tanto han sabido aprovechar sus primeros rivales. La última media hora deparó además la reaparición de Fran Álvarez y el entrenador pudo reservar también a Diego Soto para compromisos inmediatos que darán más trabajo. El próximo fin de semana, en A Penafita de Amoeiro, los unionistas deberán confirmar si responden bien a la terapia de las victorias encadenadas.
