Como última prueba competitiva organizada por la Fundación Ado Moure y el Club Ciclista Ourensano tocaban los Juegos Mundiales de ciclismo, en el tradicional circuito de Loñoá, y que este año cumple su cuarta edición. Con un circuito sinuoso de 6 kilómetros, al que los 80 participantes tuvieron que dar un total de 10 vueltas, a las 11.00 horas se daba la salida bajo una fuerte lluvia que no remitiría en el transcurso de la prueba.

En las primeras vueltas fueron numerosos los intentos de escapada, pero el fuerte ritmo al que rodaba el pelotón hacía inútiles todos los intentos de escapada. A falta de cinco vueltas, un grupo de cuatro unidades saltaba del pelotón. Rodrigo Enrique, del Speed Road, David Burgo, del Chantadino, Vicente Alló, del Bici o Con, y Fernando Nuñez, del Ría de Vigo serían los protagonistas de la fuga del día.

La indecisión del pelotón y la fuerza con las que rodaban en cabeza hizo que rápidamente abrieran una brecha que, a la postre, les sería suficiente para jugarse la victoria final. En un apretado sprint David Burgo saldría como vencedor del terceto que se presentó en línea de meta, ya que el corredor del Bici o Con, Vicente Alló, se iría al suelo después de patinar en una curva. Aún así lograba llegar a meta unos segundos por delante del pelotón y hacerse con el segundo puesto en la categoría Máster 40. Segundo de la prueba y ganador en la categoría sénior, el corredor de A Rúa Rodrigo Enrique, del Speed Road, tercero y ganador en Máster 40 Fernando Núñez, del Ría de Vigo. Juan Álvarez, del Louriña daba entrada al pelotón,.