Santi Mina se ha convertido en el catalizador del gol en el Celta. El joven delantero canterano ha aprovechado el momento de dificultad del equipo y la eliminatoria de Copa del Rey para liderar la reacción celeste y reclamar mayor peso en el equipo. Y el chico parece haber convencido a Berizzo, que ha recurrido a él para refrescar el ataque en el último partido de Liga ante el Málaga y ha vuelto a utilizarlo para dirigir la remontada copera ante Las Palmas.

El delantero vigués ha recogido el guante que le ha lanzado el técnico argentino y siente que su papel en el equipo ha dado un giro de 180 grados. "He pasado no contar mucho a jugar, pero así es el fútbol. Yo siempre trabajo para jugar, ahora estoy teniendo algunas oportunidades y trato de aprovecharlas al máximo para continuar jugando y ayudar al equipo", señala el artillero, que ha vuelto a encontrar en la Copa del Rey -también hizo goles en este torneo el pasado curso- un excelente trampolín para disponer de minutos en la Liga. "Estoy teniendo suerte de cara al gol en la Copa y espero que sigamos haciendo un buen papel en esta competición. Trabajaremos duro para seguir pasando rondas",subraya.

Berizzo ha alternado al joven delantero vigués en ambas bandas con interesantes prestaciones. En compromiso liguero frente al Levante y el pasado martes en Copa frente a las Palmas Mina actuó arrimado a la banda derecha, en la posición que habitualmente ocupa Fabián Orellana; en La Rosaleda y en el duelo de ida copero disputado en el estadio Gran Canaria jugó pegado al costado izquierdo, supliendo a Nolito. El chico apunta que no tiene una posición preferente; su única prioridad es jugar. "La posición me da igual", afirma. "A veces me encuentro más cómodo desde la izquierda para meterme hacia dentro y disparar, pero desde la derecha también me encuentro bastante bien picando al espacio y poniendo centros a los compañeros. Para mí lo importante es jugar, la posición me es indiferente", explica.

En cierta medida, el delantero canterano atribuye su buen momento de forma una mejoría física. "Me encuentro bien, bastante mejor físicamente que el partido de Liga que jugué contra el Levante y estoy intentando aprovechar las oportunidades", señala Mina, que precisa: "Estoy trabajando con Pedro [Rodríguez, el recuperador del equipo] en el gimnasio y me encuentro mejor, más hecho a la categoría y más fuerte en los choques".

El jugador celeste, que no pudo acabar el partido ante Las Palmas, tras recibir un golpe, afirma que llegará en perfectas condiciones al duelo liguero del viernes ante el Almería y espera ser titular, si el entrenador lo considera oportuno. "Tengo dolor por el golpe. Me dieron en el nervio ciático, se me durmió la pierna y no podía seguir. Me estoy tratando con antiinflamatorios y tengo algo de dolor pero por el resto todo bien", revela Mina, Y remacha: "Estoy disponible y es el míster el que decidirá quién juega el viernes. Yo trabajo para esta a su disposición".

El protagonismo adquirido en las últimas semanas ha reforzado la idea inicial del artillero canterano de no abandonar el Celta en el mercado de enero, desoyendo ofertas de equipos de Segunda División como el Tenerife o el Valladolid. "Desde el primer momento sigo con la postura de quedarme. El Celta también me quiere en y ahora que estoy contando con más minutos ningún momento me he plantado salir, sin no en trabajar para jugar más", anuncia Mina, que espera que la reacción del equipo en la Copa tenga continuidad el viernes contra el Almería, en el último partido del año. "Nos volvimos a reencontrar con el gol. El equipo supo jugar el balón, tuvo profundidad y volvió a encontrar la portería. Esto nos da confianza para conseguir los tres puntos contra el Almería, pero solo es un partido más", afirma.