El Sevilla se recolocó en condiciones de luchar por entrar en competiciones europeas al lograr su quinta victoria consecutiva en casa (4-0) a costa de un Zaragoza por completo inoperante en ataque y que acusó la expulsión de su centrocampista Babovic a la media hora. Los maños acumulan 11 jornadas ya sin conocer la victoria.

Los sevillistas, no obstante, ya se habían adelantado cuando el serbio vio su segunda amarilla por medio de Coke, que reincidió ante el gol en los primeros minutos de la segunda mitad antes de que los internacionales José Antonio Reyes y Álvaro Negredo completasen la goleada en sendos contragolpes.

A pesar de que el técnico visitante, Manolo Jiménez, pobló su centro del campo con tres pivotes defensivos, el Sevilla llegó con mucho peligro en los primeros minutos y sólo las buenas intervenciones de Leo Franco impidieron que el 1-0 llegase primero con un libre directo de Rakitic y, posteriormente, con un disparo a bote pronto de Reyes.

Coke adelantó al Sevilla a la salida de una falta lateral mal defendida por el Zaragoza, pues el madrileño tuvo todo el tiempo del mundo para controlar el balón antes de ajustar su remate y, casi sin solución de continuidad, vio la segunda amarilla Babovic por agarrar a Kondogbia.

En inferioridad numérica, los visitantes afrontaban un misión imposible y sus escasas opciones de puntuar desaparecieron cuando Coke, a los siete minutos, enganchó un disparo desde una esquina del área grande que fue recto a la escuadra opuesta.

El doble cambio der Jiménez, que trató de dotar de algún mordiente a su equipo con Bienvenu y Rochina, tuvo el efecto contrario: descompuso al Zaragoza y el Sevilla cerró la goleada con dos tantos a la contra de Reyes y Negredo.