Medio centenar de partidos ha transcurrido desde que Álex Fernández dejó la posición de lateral para instalarse en la medular. El futbolista ourensano confiesa que no echa de menos su anterior cometido. Sí lo harían sus compañeros de ataque porque de sus botas han partido cinco asistencias de gol. En lo que va de curso, dos tantos de Sanginés fueron servidos por Álex Fernández, quien también brindó balones que acabaron en la red a Adrián Quintairos, Jaime Noguerol y, el último, a Óscar Martínez en Gijón.

Todavía con Patxi Salinas en el banquillo, el futbolista que llegó hace dos veranos de Lorca comenzó a adquirir protagonismo en el balance ofensivo como interior. Antonio Dacosta le dio por primera vez la manija como compañero de Yebra en el doble pivote y con Luisito solo se retrasó a la defensa en dos ocasiones para cubrir contratiempos en Villalonga (empezó de central y se adelantó en la segunda parte) y San Sebastián de los Reyes (cubrió el lateral izquierdo por una lesión de Claudio).

"Siempre dije que estoy para obedecer órdenes y ayudar en lo que sea, pero no cabe duda de que me siento mejor en el medio del campo y creo que también puedo aportar más desde ahí", explica el jugador como balance de su reciclaje. El técnico coincide con su apreciación porque Álex Fernández es el rojillo con más minutos disputados, un total de 2.340, por encima incluso del portero Pato. Las lesiones le respetan y solo se perdió un domingo de liga por acumulación de amonestaciones.

El único pero que se impone es el gol. La pasada temporada en Tercera División marcó seis, varios de bella factura, y anuncia que no cejará en el empeño hasta sumarse a la lista de goleadores del Ourense: "Este año se me está resistiendo, no veo puerta, y a ver si por lo menos llega en los últimos partidos".

La oportunidad inmediata se presenta ante el Fuenlabrada, un rival que le dejó una grata impresión en la ida: "En la primera parte fueron el único equipo, quitando el Atlético B, que pareció superior a nosotros. En la segunda se igualó el partido e incluso pudimos empatar. Ningún equipo nos había jugado con tanta gente por dentro, los interiores también se iban para adentro y nos hicieron mucho daño".

Más que en el pasado en la élite de algunos futbolistas de la plantilla madrileña, Álex Fernández se fija en su rendimiento: "Tienen gente veterana y de nombre, pero además rinden a buen nivel y si están por arriba es por algo. Nos parecemos en querer la posesión, pero habrá que estar muy concentrados en las jugada a balón parado defensivo y en las jugadas por banda. Tenemos que salir mentalizados ya desde Ourense de que nos vamos a encontrar un partido complicado."

Entiende que el Ourense debe ser fiel a sus principios asociativos: "No debemos renunciar a lo que sabemos hacer, que es tener el balón cuanto más lejos mejor de nuestra portería y seguir siendo duros en defensa".

Un buen partido en Fuenlabrada servirá para igualar la mejor secuencia de resultados de la liga, la que se prolongó entre las jornadas 10 y 15. "Esa racha nos puso ahí arriba, ganamos en casa y arañamos puntos de campos importantes y puntuar en Fuenlabrada ayudará a conseguir el objetivo lo antes posible". Con la permanencia en el bolsillo, Álex se permitirá pensar en el futuro, aunque su deseo es seguir en casa: "Estar aquí es agradable, sobre todo por mi familia. Ya que me siguieron a todas las partes a las que fui, ahora que disfrutar de estar con los suyos".