Un golazo de Vasco en el minuto 82 de partido permite al Domaio ver la luz al final del túnel. Los moañeses llevaban cinco derrotas consecutivas y ayer recibían en A Granxa a un rival directo, el Chaín. La tensión de lo que estaba en juego se dejó sentir desde el primer minuto del partido, con ambos conjuntos apostando por un juego directo y más preocupados de no cometer errores.

Durante esos primeros 45 minutos las dos únicas ocasiones de gol fueron para el Domaio. La primera fue en el minuto 15, con un balón de Bombi al espacio y que Cousido no fue capaz de transformar en gol. Al filo de la media hora fue Cris el que centró atrás para un remate de Maroto, que se le fue arriba.

La presión fue en aumento en el segundo tiempo. El Domaio pudo tomar aire gracias a los cambios de Javi Tenorio, que dio entrada a Javi, Berto y Abrahan. Javi y Abrahan tuvieron sendas oportunidades que se fueron rozando el palo. El gol llegó en el minuto 82, después de un centro sobre el área del Chaín que la defensa visitante pudo despejar. El balón salió hacia un lateral del área y Vasco, que venía en carrera, empalmó una volea sin dejar botar la pelota que significó el 1-0. En los últimos minutos el Chaín buscó a la desesperada el empate y dejó más espacios. En el minuto 90 el Domaio pudo montar uncontragolpe, que la defensa visitante solo pudo cortar cometiendo un penalti. Leiro disparó ajustado al palo, pero el portero adivinó su intención y rechazó el balón. Con este triunfo el Domaio suma 35 puntos.