"Hemos dejado el pabellón bien alto en Santiago y demostramos que somos un muy buen equipo, aunque también es cierto que cambiaría el partido que hicimos por los puntos". La reflexión es del entrenador del Alondras, Antonio Fernández, después de la dolorosa derrota de los suyos en el campo del líder, el Compostela, y después de que los rojiblancos realizasen un gran encuentro. "Nos faltó el gol, mal endémico que a veces tienen los equipos, pero hay que generar ocasiones y nosotros lo hicimos. El equipo ofreció fútbol, desequilibrio sobre un gran rival y fue superior en muchas fases del juego, y eso me hace sentir muy orgulloso", afirma.

Lo cierto es que San Lázaro sirvió para doctorar a los alondristas en el campo más mítico de la categoría y ante un rival diseñado para ascender a Segunda División B. "Estoy contento por el partidazo que hicimos aunque nos haya faltado gol. El fútbol ha sido injusto con el resultado, pero también ha sido justo con los resultados de los rivales", señala. Y es que la jornada fue bastante propicia para los intereses del Alondras, con las igualadas de Somozas y Villalbés y las derrotas de Silva y Barco. Así, el equipo morracense suma 54 puntos en la séptima plaza, a tres de Villalbés y Barco (tercer y cuarto clasificado). "Estamos a un punto más del cuarto, pero a los mismos que estábamos del tercero. Yo veo el vaso medio lleno", subraya Antonio Fernández. El atasco en la parte alta de la tabla clasificatoria es monumental, con cinco equipos en un margen de tres puntos. Además de los mencionados Villalbés, Barco y Alondras, el Somozas y el Arosa suman 56 puntos.

De algo tiene que servir la racha de nueve encuentros sin perder que el Alondras encadenó en el arranque de 2018. "Las dificultades son máximas para todos. El Somozas no pasó del empate ante el Céltiga y el Villalbés tampoco pudo batir al Negreira", reflexiona el entrenador rojiblanco, que afirma que "vamos a estar tranquilos, porque si nos dicen hace tiempo que íbamos a estar luchando por estas posiciones a falta de seis jornadas quién se lo iba a creer". Eso sí, marca ya el siguiente objetivo para los suyos, y ese no es otro que el de imponerse el próximo fin de semana al Areas. "Si ganamos dependeremos de nosotros mismos, porque aún quedan enfrentamientos directos", comenta. Y es que Areas y más adelante el Céltiga son las excepciones en un calendario en el que los rojiblancos deberán medirse a tres de sus rivales directos por la promoción de ascenso (Barco, Somozas y Arosa) además de al segundo clasificado, el Bergantiños.

Para el duelo frente al Areas Fernández quiere enganchar a la afición para convertir el campo de O Morrazo en una fiesta, pero también en una olla a presión. "Si el pueblo quiere soñar, tiene que venir en masa a ayudarnos. La afición de Cangas tiene que mostrarse ante un equipo que transmite ilusión y que quiere soñar", subraya. Con un notable rendimiento como local (nueve victorias, cuatro empates y solo tres derrotas en 16 enfrentamientos), el Alondras aspira a que su feudo continúe siendo talismán y le sirva para sentar las bases del sueño de la fase de ascenso.